Nacho Mastretta es ¿actor?, ¿uruguayo?. No, músico y cántabro. Dice su biografía que lo de nacer en Barcelona nunca ha pasado de ser una anécdota accidental. Pero que su cuna, las dos más bien, están en Santander. Las dos porque sería ya crecido cuando Nacho nació a la música, entre los atriles del conservatorio Jesús de Monasterio. Desde allí, el tiempo ha visto crecer a un conquistador, a un aventurero. Y es que ese niño grande, de barba desaliñada y ojos pícaros, prestos a comerse el mundo entre una mueca de ingenuidad, ha sido un adalid de las conquistas, de esos a los que más que luchar contracorriente les da por hacer de su capa un sayo y, bajo el pretexto de la libertad personal, nos acunan el alma entre delicias.

Menos mal que en Madrid aun hay sentido común. Eso debió impulsar a ‘Subterfuge Records’ a echar un capote a uno de los más geniales instrumentistas y compositores conocidos y a abrir una carrera, que aunque etiquetada con las músicas de Jesús del Pozo, Wolkswagen o Kas, ha tejido lo mejor, lo más sensual y lo más inteligente de Alaska, Julieta Venegas, Rubi o Cristina Lliso, a la vez que ha musicado historias de dolor y delicia como ‘Asfalto’ (Daniel Calparsoro), ‘Malas Compañías’ (Antonio Henz) o ‘El sueño del Caimán’ (Beto Gómez). Así que hemos pensado que un hombre que lo mismo hila un desamor que desarregla a ‘Star Wars’ (en su álbum ‘Bascombe’ para el Donosti 200), bien merece una entrevista, para que se explique y nos cuente en dónde enraíza tanto genio, tanta creación y tanta sensibilidad. Así que hemos degustado una cálida y generosa entrevista telefónica con quien es, para nosotros, uno de los mejores músicos nacionales, un compositor tocado por las hadas. Con ustedes, Nacho Mastretta.

Pregunta.-Eres multiinstrumentista, ¿cuántos instrumentos tocas y cuál es tu preferido?
Respuesta.-Toco muchos instrumentos, pero mis dos favoritos son el clarinete y el piano. Aun así considero que es importante manejar todos los instrumentos, aparte de que resulta útil y más divertido.

P.- ¿En qué estilo clasificarías tu música?
R.- Dentro del panorama actual como música popular e instrumental; no tengo una clasificación dentro del género comercial. Nuestra música es muy respetuosa con la tradición y valoramos los grandes compositores e intento seguir su ejemplo.

P.- Bueno, dentro de tu estilo de música hay una anécdota que protagonizó el periódico ‘El País’ cuando en el año 1998 nombraron a tu disco ‘Melodías de Rayos X’ como mejor álbum electrónico del año sin ser de estilo electrónico.
R.- Sí, bueno, los años 90 trajeron consigo la nueva tecnología. Entonces nosotros, los que no teníamos posibilidad de grabar, pudimos grabar con equipos digitales, y con ellos podíamos montar bastante bien. Esto fue una novedad, todo lo que estaba hecho con samplers u operaciones digitales pasaba a considerare algo de música electrónica, aunque la realidad es que nunca me ha llamado mucho la atención el mundo de la música electrónica.

P.- Tienes contrato con la productora ‘Subterfuge’, como muchos grupos españoles de carácter independiente, ya que ‘Subterfuge’ apuesta mucho por ellos. ¿Cómo te ha ido con este sello?
R.-Pues realmente bien. El sello ‘Subterfuge’ apuesta por la música independiente. En la época en la que empecé dominaba la música punk y rock, ellos se abrían a otras cosas y como yo trabajaba de técnico de sonido en una sala de esta productora, la sala ‘El Sol’, les mostré mi proyecto y confiaron en mi, y estoy muy agradecido porque pude llevar mi proyecto adelante.

P.- ¿Qué influencias musicales tienes?
R.- Me gusta la música clásica. Estudié piano clásico hasta los 19 años, pero también me gusta la música popular de Brasil, de Cuba y por, supuesto, el jazz de EEUU. La verdad es que me gusta la música muy variada, también me gusta algo de la italiana… En fin, tengo muchos músicos como referentes y entre ellos algunos imprescindibles.

P.- Y dentro de esos músicos, ¿podrías escoger a los tres más imprescindibles?
R.- Por ejemplo, ahora mismo dentro de lo que estoy haciendo y con la modestia con la que yo pueda abarcar esa música, diría John Kellington, Nino Rotta y Astor Piazzolla, que es un músico muy bueno de tango argentino.

P.- ¿Con que intención grabaste tu disco ‘Luna de miel’?
R.- Había grabado ya bastante música instrumental, vamos, en realidad todo lo que hice durante los 90 fue instrumental, y se me ocurrió experimentar llamando a cantantes de otros ámbitos para hacer canciones de este estilo. Fue una especie de capricho. Aunque son canciones más bien intemporales, que no se pueden clasificar en ningún estilo comercial.

P.- ¿Qué canción es la que más te enorgullece?
R.- Nunca lo había pensado. Creo que elegiría alguna del nuevo disco, porque es un estilo muy bailable y además es en directo. Se nota claramente un cambio desde el anterior disco de hace 8 años, porque ahora quiero que suene una experiencia musical real y toda la emoción que se siente al trabajar con más músicos y no una recreación. Creo que eso ayuda a la gente a que entiendan el sentido de esta música. Y también quiero que la gente vea la comunicación entre los componentes del grupo.

P.- ¿Una canción que esté siempre en tu repertorio?
R.- Creo que ‘Sábanas blancas, cama estrecha’, del primer disco.

P.- ¿Mejor disco de otra persona?
R.- ‘Olimpia’, de Edith Piaf. Es un disco maravilloso con una fuerza tremenda y con una orquesta fabulosa.

P.- ¿Cómo surgió tu anterior grupo, ‘Las Manos de Orlac’?
R.- Ese fue el grupo que tuvimos desde el principio. Nos reunimos unos amigos en un local de ensayo y empezamos a hacer música y de ahí salio un grupo. Íbamos haciendo repertorios. En los años 80 en Santander no había mucho ambiente musical y todavía estaba la sombra del franquismo, así que no había muchas actividades culturales cuando comenzamos con ese proyecto.

P.- ¿Por qué lo dejásteis?
R.- Bueno… todo llega a su final. En ese momento ya veíamos que había que cambiar un poco las cosas; ya llevábamos muchos años juntos, cada uno se iba por unos gustos diferentes, yo me fui a vivir a Madrid… Ahora, con el tiempo, lo recuerdo con pena.

P.- ¿Cómo se lleva eso de ser un artista en solitario?
R.- La parte de componer es un trabajo solitario, igual que los escritores. Tienes que esperar a que te venga una idea, sacar una melodía, irla puliendo… Lo bueno es que después, a la hora de tocar con los músicos del grupo, te sientes más cómodo. Y sientes que transmites mejor a los músicos. Pero también estás un poco abstraído y siempre en tu película.

P.- ¿Qué opinas del fenomeno ‘Myspace’?
R.- Me parece fabuloso. Lo comparo con lo de los radioaficionados que había antes. Que podías conocer a gente de todo el mundo y podías darte a conocer. Me parece parecido, pero con la música. También es una forma de conocer estilos nuevos.

P.- ¿Y del panorama comercial?
R.- Bueno… eso ya existe desde hace mucho y tampoco han cambiado los nombres; Miguel Bosé ya existía cuando yo era adolescente. A mi personalmente no me interesa ese tipo de música, porque me parece todo lo mismo. Opino que la música tiene que aportar otras alternativas.

P.- También has hecho trabajos de producción, ¿no?
R.- Sí, pero siempre lo hago con gente que empieza con su primer disco.

P.- ¿Volkswagen Polo te pide canciones exclusivas para sus anuncios?
R.- Sólo lo he hecho en dos ocasiones, pero lo agradecí muchísimo, como en el caso de Heineken, para la que también trabajé.

P.- ¿Cuál es la sala en la que más te gusta tocar?
R.- La sala ‘El Sol’ de Madrid, porque trabajé mucho tiempo en ella.

P.- Y para terminar, ¿qué pregunta te gustaría que te hiciésemos?
R.- Jaja… No lo sé, ahí me habéis pillado, tendría que ser más rápido para estas cosas.

 

Trabajo original