¿Vías bajo tierra? Pocas ciudades como Torrelavega se ven obligadas a convivir diariamente con una maraña de vías de tren que la atraviesan y la paralizan cada quince minutos. Dos importantes calles, por su tráfico de coches, se ven afectadas por el corte de la circulación de forma casi constante. ¿La solución?. Dicen los técnicos que soterrarlas.
El soterramiento de las vías consistiría en excavar un túnel de 2 kilómetros de longitud que iría desde las proximidades del aliviadero de tormentas de Barreda, hasta el apeadero del Bulevar Comercial Altamira. El soterramiento produciría la eliminación de dos pasos a nivel con barreras muy conflictivos que causan grandes colas de coches y un malestar general de todos los vecinos que tienen que pasar por allí varias veces al día. Estos dos pasos a nivel con barreras se encuentran en Pablo Garnica y el Paseo del Niño. También se eliminaría la diferencia física que existe entre los vecinos de un lado de las vías y los vecinos del otro lado. Se conseguiría la unidad ciudadana, porque las vías del tren dividen la ciudad en dos partes demasiado diferenciadas.
El soterramiento de las vías también dejaría una gran zona de terreno libre para la ampliación de aparcamientos, mejoras en las zonas públicas, apertura de nuevos comercios y creación de zonas verdes, necesarias y beneficiosas para la gente y el paisaje urbano de nuestra ciudad, siempre marcada por la contaminación. También se podría dedicar el área liberada a la construcción de viviendas sociales, al hacerse sobre terreno público.
Se ha realizado un estudio sobre los pasos a nivel en el que aparecen las veces que se cierran dichos pasos a nivel. Cada uno de ellos se cierra 478 veces a la semana porque son los trenes que pasan en una semana. Es decir, en un año se cierran 24.924 veces, que equivale en horas a más de un mes.
El soterramiento de las vías beneficiaría al Medio Ambiente en el aspecto de que se emitiría menos humo de los coches que están parados esperando a que pase el tren y también disminuiría la contaminación acústica que producen dichos coches y que afecta a los vecinos de la zona.
Toda la obra costaría según el Ministerio de Fomento 1,4 millones de euros, que en las antiguas pesetas serían 400 millones de pesetas, obra que se incluiría en los Presupuestos Generales del Estado y que la apoyarían dependiendo del adelanto de la obra.
Pero este soterramiento y las mejoras que arrastra no se van a producir, parece ser, por un error de tramitación de nuestro Ayuntamiento. Al menos en los seis años siguientes estas obras no van a poder iniciarse porque Torrelavega no ha sido incluida en el convenio que se ha firmado hace un mes en Madrid, y que tenía como finalidad erradicar todos los pasos a nivel de FEVE de la región. En este convenio aparecen para ser erradicados los pasos a nivel de Bezana, Renedo de Piélagos y otros que han sido eliminados ya en Santander, Arco de la Bahía y Camargo, pero Torrelavega no aparece por ningún lado en este convenio.
Cuando se trata de Torrelavega todo el mundo mira hacia otro lado pero es una ciudad como todas las demás que merece el mismo trato desde todo punto de vista.