Salimos de excursión desde nuestro colegio hasta la estación de esquí de Brañavieja. Cuando nos bajamos del autobús todos empezamos a tirarnos con la nieve.

Esperamos a que llegaran los niños del otro colegio con los que compartíamos la actividad y nos fuimos a alquilar el material (esquís, bastones, botas).

Al cabo de un rato llegamos al hotel La Corza Blanca que era donde nos quedábamos toda la semana. Allí nos repartieron las llaves y fuimos a dejar los equipajes.
Subimos a la nieve con los dos profesores de Educación Física que hay en el cole, Ana y Julio. Julio, como yo, era el primer año que subía.

Ana nos reunió a todos a la entrada del hotel para explicarnos a la hora que teníamos que levantarnos y todas las cosas que se iban a hacer todos los días.

Al día siguiente nos dijeron con que profesor nos iba a tocar en el cursillo. El nuestro era Oscar, aunque todo el mundo le llamaba Gaspa. Cada uno se fue a su cursillo, nosotros fuimos a aprender a hacer cuña y a frenar. El primer día, de mi grupo, nos caímos todos.

A la hora de comer íbamos al hotel porque el tiempo no era muy bueno. Por la tarde cogimos las perchas que son unas barras y un plato que te lo pones en el culo y te sube.

Cuando llegábamos al hotel nos duchábamos y nos cambiábamos. Después jugábamos al bingo, a la quiniela y a distintos juegos.
Luego había tiempo libre, cena, reunión y a dormir. Esto lo hicimos todos los días menos uno que hizo ventisca y no pudimos ir a esquiar.
El último día fue muy divertido porque hicimos un eslalon, que consistía en pasar por unos palos girando. ¡Y nos bajamos el Chivo alto!. Después comimos y volvimos a casa.

Trabajo original