Compuesta entre 1605 y 1606, ‘Macbeth’ es una de las tragedias más estructurada y mejor construida de todas las de William Shakespeare (1574-1616), quien nos adentra en un mundo oscuro y fantasmagórico de discordia y de confusión moral donde somos testigos de la degradación de un hombre impulsado por la ambición de Lady Macbeth.

Título: ‘Macbeth’
Autor: William Shakespeare
Año: 1605-1606
Editorial: Alianza
Otras obras del autor: Enrique VI, La fierecilla domada, El mercader de Venecia, Hamlet, Julio César, Romeo y Julieta, Otelo, El rey Lear, La tempestad.

Actualmente pronunciar el nombre de William Shakespeare es recurrir a la firma de uno de los más sobresalientes dramaturgos, no sólo de la literatura de su país natal (Gran Bretaña), sino, muy probablemente, de la literatura universal.

Resulta complicado imaginar cómo un autor tan difícil, con un lenguaje tan arcaico, haya perdurado tanto en el tiempo. Sin duda alguna, se debe a su brillante conocimiento de la naturaleza humana, presente en casi la totalidad de sus obras. Como veremos a continuación, Shakespeare perfila profundamente la ambición humana en su tragedia, Macbeth.

La historia se desarrolla en Gran Bretaña, en una época asolada por grandes enfrentamientos bélicos. La acción comienza cuando un mensajero, proveniente de la guerra entre escoceses y noruegos, llega hasta Duncan, rey de Escocia. El mensajero le transmite la gloriosa noticia de que los escoceses han vencido a los noruegos, gracias a la inestimable labor de los generales del ejército escocés: Macbeth y Banquo.
Por lo demás, los noruegos se han rendido, al igual que su rey. Duncan no duda en alegrarse y de obsequiar a Macbeth con el título nobiliario de Conde de Cawdor.

Mientras tanto, Macbeth y Banquo caminan de vuelta a casa, agradeciendo a Dios su protección en la guerra. De repente, se encuentran a tres brujas hermanas. Hablando con ellas, éstas les vaticinan futuros grandiosos: a Macbeth le prometen dos grandes títulos (Conde de Cawdor y rey de Escocia) mientras que a Banquo no pueden prometerle un título regio, pero sí a sus hijos, los cuales serán reyes. Acto seguido, las Hermanas Fatídícas (como llama Shakespeare a estos seres) desaparecen sin más.

Aturdidos por el encuentro con las hermanas, Macbeth y Banquo continúan el camino hacia casa y hablando sobre los grandiosos futuros que los esperan. Es entonces cuando, a mitad de camino, les aborda un mensajero del rey Duncan. Éste le dice a Macbeth que el rey le obsequia con el importante título de “Conde de Cawdor” Entonces, Macbeth, le hace ver a Banquo que las Hermanas Fatídicas no mentían. Ya se cumplió la mitad de su vaticinio.

Cuando llegan ante Duncan, éste les agradece, nuevamente, sus notables servicios prestados y Macbeth invita a Duncan y a sus hijos; a Banquo y a su familia y, también otros amigos (como Lennox, Macduff……) a su casa para degustar un gran banquete y dormir en su domicilio. Todos aceptan encantados.

Es entonces cuando Macbeth comenta a su mujer (Lady Macbeth) el encuentro con las Hermanas Fatídicas y su primer acierto en el futuro de él mismo. Durante la noche que precede al banquete, Lady Macbeth y él mismo (basándose en el segundo pronóstico de las hermanas) planean el asesinato de Duncan ya que, estando él muerto, no habría otro hombre (a excepción de los hijos del monarca) para ocupar el puesto.

Y así ocurre. Durante la noche (horas más tarde de la finalización del banquete) Macbeth se acerca hasta los aposentos de Duncan y lo asesina. A la mañana siguiente, todos se percatan del homicidio y acusan del mismo a los centinelas que guardaban los aposentos (drogados por Lady Macbeth, horas antes). Mientras tanto, los hijos de Duncan (Malcolm y Donalbain) -huyen de la casa de Macbeth por temor a ser también asesinados. Los demás invitados llegan a interpretar este acto, incluso, como la huída de los verdaderos verdugos de Duncan.
Estando los hijos de Duncan fuera, Macbeth logra ocupar el trono de Escocia, proclamándose así rey de Escocia.

Pero su ambición y afán por conseguir aún más, lo llevan a él y a su mujer a dar la orden de llevar a cabo el asesinato completo de la familia de Banquo (ya que las Hermanas Fatídicas le auguraron engendrar reyes). Toda la familia muere a excepción del hijo primogénito de Banquo, Fleance, que huye (Banquo tampoco muere, ya que se encuentra en la casa de Macbeth con los demás invitados).

Finalmente, todos se dan cuenta de la culpabilidad de Macbeth y su mujer y Malcoim, Macduff, Banquo y demás emprenden una guerra contra el propio Macbeth y sus partidarios. Banquo y Fleance mueren a manos del inhumano Macbeth, estando éste totalmente seguro de sí mismo (ya que en un último encuentro con las Hermanas Fatídicas, éstas le auguraron que, únicamente, podría ser derrotado por un hombre no nacido de mujer).

La tragedia desvela su fin cuando Macbeth muere a manos de Macduff (debido a que éste, antes de nacer, fue sacado del vientre de su madre). Para concluir, Malcolm se proclama (lo que por derecho es suyo) rey de Escocia, después de haber vengado el asesinato de su padre.

En esta obra, Shakespeare, dibuja el perfil de una persona esencialmente buena que, cegada por su afán de lucro y ambición, acaba cometiendo actos imperdonables, que no hubiera sido capaz de realizar sin la intromisión de fuerzas superiores, las Hermanas Fatídicas.

 

Trabajo original