Los alumnos de 2º de ESO del IES Valle de Camargo asistieron el 4 de febrero en el salón de actos del centro a un encuentro con el escritor Joan Manuel Gisbert, autor de textos que cuenta con muchísimos lec-tores entre el público juvenil. Los temas preferidos de su literatura son el misterio, el enigma y la aventura… y son novelas que contienen ficción, fantasía y también alguna dosis -necesaria- de realidad.

Comenzó su intervención precisamente señalando la importancia de la aventura física, el viaje, o intelectual, el enigma, en la concepción de El misterio de la isla de Tökland. En el origen del libro está su pasión, desde los 10 u 11 años, por los enigmas; nos contó que acudía a un centro cultural de su barrio donde había un grupo que se dedicaba a plantear y resolver enigmas.
También se planteaba desde pequeño escribir historias en las que se incluyeran enigmas. Y, en efecto, este es un libro enigmático: trata de unas personas que quieren resolver el enigma del laberinto creado por Anastase Kazatkian. El libro nos ha gustado, tiene bastante intriga y un desenlace final que parece imposible, pero quién sabe si algún día no pueda suceder.

Joan Manuel Gisbert nos pareció un hombre alto, inteligente, divertido y muy majo, lleno de sabiduría, y parecía sentirse a gusto entre nosotros, fue muy agradable. Mostró su amor por la lectura y por la escritura, por la imaginación y por los juegos de lógica. Durante su charla, pudimos entender mejor el final “abierto”, y comprendimos el significado último del libro.

Durante el encuentro se produjeron anécdotas curiosas: comentó con humor que las chicas que lo acompañaban lo tenían programado durante un año (se refería a las agentes de la editorial Planeta-Oxford), y cuando un compañero, Diego, le preguntó por su parecido con Kazatkian él bromeó diciendo que no se consideraba tan viejo ni tan feo como el personaje de la novela, y que aún seguía conquistando a muchas mujeres.
Al despedirse, muy educadamente, nos ofreció su amistad y, para finalizar, firmó en nuestros ejemplares de El misterio de la isla de Tökland y prometió regresar.
Creemos que fue muy interesante la visita de este autor de libros de fantasía, porque demostró ser un hombre con imaginación para hacer soñar a sus lectores por medio de sus libros. Nos gustó mucho su libro y, sin ninguna duda, volveremos a leer otro y otro… Para poder seguir disfrutando del placer, intriga y sabiduría que encierran sus novelas.

Trabajo original