Hemos tenido la grata ocasión de entrevistar al colectivo feminista ‘Ijanas’ y, en concreto, a tres personas pertenecientes a este grupo: Sinai Gil, Yolanda Ceballos y Brezo Gómez-Laínz. Hemos escogido el feminismo como objeto de entrevista puesto que es un tema que está a la orden del día y que da mucho de qué hablar.

Pregunta.-  ¿El feminismo busca la superioridad de la mujer sobre el hombre?
Yolanda Ceballos.- En absoluto. El feminismo se basa en buscar la igualdad entre hombres y mujeres, lo que pasa es que es un movimiento encabezado por las mujeres y por eso tiene la palabra «feminismo» como terminología, que es lo que muchas veces cuesta entender.

P.- ¿Podríais explicar la diferencia entre feminismo y machismo?
Y. C.- El machismo es precisamente la superioridad de un género sobre otro en el que te basas en la diferencia de poder y el aprovechamiento de ello. Por el contrario, el feminismo busca  romper con esto que está establecido y buscar la igualdad de derechos, no de estar abajo a arriba en una escala, sino estar todos en una misma posición.

P.- ¿Creéis que el machismo está superado?
Brezo Gómez-Laínz.- Todavía no, día a día te encuentras con cualquier situación en la que se ve que un hombre por el hecho de serlo actúa de una manera en la que se pone por encima de una mujer. Por eso estamos ahora, bueno, desde hace mucho tiempo, intentando romper esa superioridad que es ficticia.

P.- ¿Pensáis que existen hombres feministas?
Sinai Gil.- Sí, obviamente existen. Nosotras siempre decimos que el feminismo es una lucha encabezada por mujeres por y para las mujeres, pero no es una lucha en la que sólo nosotras tengamos algo que decir. Los hombres, al ser parte de nuestra sociedad y de nuestro día a día, tienen que tener también unas conductas que apoyen nuestras reivindicaciones.
Y. C.- A pesar de esto aún hay conflicto entre si es correcto llamarles feministas o “aliados del feminismo” debido a que esta lucha es por y para la mujer.

P.- ¿Existen las mujeres machistas?
Y. C.- Es algo un poco por el estilo a lo anterior. Al final, el machismo es como el sistema que pone a los hombres por encima. Entonces, una mujer que sea machista es porque se reconoce como inferior, pero no se está poniendo por encima de nada porque sigue poniéndose por debajo de los hombres. Vamos a decir, en cuanto a términos, que está «alienada» y que más que ser machista, tiene comportamientos machistas. Además todo lo que ejerzamos en nuestra vida va a tener esos rasgos. Habría que hacer una reconstrucción muy grande para cambiar completamente y no tenerlos dentro.

P.- ¿Y qué pensáis sobre el aborto y la niña de 12 años que tras ser violada no pudo abortar?
B. G-L.- Sobre el aborto tengo una idea muy clara, y es que el aborto es una decisión más en tu vida y, pese a que el futuro hijo que pudieras tener es de dos, la que siempre va a asumir ese papel sí o sí es la mujer, es decir, es la que tiene que pasar por esos nueve meses de embarazo. Además el aborto supone un riesgo vital para las mujeres y entonces se considera como un privilegio, y para nada; es un derecho que debería tener cualquier mujer. Creo que la mujer si se considera incapaz de ser madre o considera que no es el momento adecuado para serlo, debería ser totalmente libre de elegir si seguir o no, porque esta no es una decisión fácil y aunque lo hagas tiene unos desenlaces y unas consecuencias increíbles. Por ejemplo, Sinaí y yo hacemos Enfermería y Yolanda está estudiando Medicina y vemos todos los días que las mujeres que deciden abortar no las parece como decidir si comprarse caramelos o no. Es una decisión muy complicada, pero cualquier mujer debería tener la oportunidad de hacerlo si ella quiere.

P.- ¿Creéis que el machismo tiene algo que ver con la homofobia?
Y. C.- Se pueden ver factores que sí. Por ejemplo, que entre los hombres no pueden llorar, y el que llora es un «mariquita». Eso es muy homófobo, y el problema es que esa palabra se refiere a que «mariquita» se parece a una mujer y, supuestamente, eso es lo malo. Está claro que la lucha feminista y LGTB están muy relacionadas en algunos factores, pero no van de la mano.

P.- ¿Existe el término ‘feminazi’?
B. G-L.- Existir, existe. Usado como insulto para reírse del movimiento feminista. Ninguna de nosotras conoce a nadie que se considere ‘feminazi’ y si dentro del feminismo no encuentras a nadie que se considere ‘feminazi’, creo que es un término inventado para reírse de nosotras.
Y.C.- Ya no sólo por ridiculizar la lucha, me parece demasiado comparar el nazismo con el feminismo y este término provoca enormes prejuicios sólo por el nombre.

P.- ¿Creéis que en los colegios se educa para evitar el machismo o se pasa por alto?
S. G.- Yo creo que ahora han empezado a surgir cosas, pero se debería dar más importancia, porque esto empieza desde que tenemos tres años y hablamos con nuestros padres. Por ejemplo, las batas de división de colores, los niños con los niños y las niñas con las niñas, los niños juegan al fútbol y las niñas con las muñecas…
Y. C.- Hay más herramientas, pero no se aprovechan al máximo. Sé que en algunos colegios hay personas que trabajan en ello como, por ejemplo, los responsables de igualdad.
B. G-L.- Al final, los profesores también son personas y tienen el machismo integrado en sí mismos, va a depender de que tu tutor en el cole sea más o menos machista o más consciente. Al final, por muchos sistemas que pongan, también tiene que ser un trabajo personal de los docentes.

 P.- ¿Creéis que algún día nuestra lucha como mujeres tendrá su total recompensa?
Y. C.- Totalmente. Nos va a costar mucho tiempo, es poco a poco. Siempre que mejore la situación anterior ya es una recompensa suficiente
B. G-L.- A lo mejor no lo conseguimos nosotras, pero podremos decir que algo hemos avanzado y que esto va para adelante.

 P.- ¿Consideráis que hemos mejorado como sociedad en los últimos cinco años?
Y.C.- Sí, simplemente por el 8 de marzo. El año pasado en todo el mundo fue un gran día. Hace 20 años el 8 de marzo era un día en el que sólo salía la mujer trabajadora a nivel laboral, pero una mujer de alta clase social no lo veía como que era su lucha y el año pasado ya empezó a haber un cambio.
B.G-L.- En el día a día hay muchas más conversaciones sobre el papel de las mujeres y los problemas que sufren. Yo misma hace cinco años no tenía ni idea del feminismo y ahora me muevo más.
S.G.- Las redes sociales han sido una buena herramienta para abrir un frente para hablarlo y que sea un problema cotidiano y eso siempre va a ir bien.
Y. C.- Y además, en las noticias se han incluido palabras que hablan las feministas y son la realidad, el machismo está ahí y hablan del machismo.

P.- ¿Qué es el hembrismo?
Y.C.- Es la invención que se ha construido para ridiculizar la lucha de las mujeres. Es un concepto que han creado para denominar a las que se pasan de feministas. Es, por así decirlo, equivalente al machismo. Pero esto es imposible, porque no hay ninguna sociedad que apoye eso. Nosotras cuando hablamos de machismo existe un concepto que es la sociedad patriarcal en la que todo se basa en la superioridad del hombre sobre la mujer. La superioridad de la mujer sobre el hombre no existe en ningún sitio. En mi opinión, este término no existe.
B. G-L.- Por así decirlo esto es como el “tú eres tonta; no, tú más”. Es como decir “vosotras sois más brutas”. Simplemente es un insulto para reírse de la lucha. Es una táctica de los hombres de despreciar algo.

 

IJANAS es una  Comisión Feminista no-mixta del Colectivo de Estudiantes de Cantabria