¡Qué divertido! Íbamos a ir a El Diario Montañés a ver sus instalaciones y descubrir cómo se hace un periódico y cómo es un plató de televisión. Bajamos del colegio hasta la plaza de Numancia y allí tuvimos que esperar casi una hora a que el autobús viniera, además se puso a llover.

Cuando por fin vino todos entramos (un poquito enfadados), con unas grandes ganas de ver cómo era el sitio donde se hace el periódico y la televisión.

Cuando llegamos, nos presentaron a una chica que se llamaba Isabel, que iba a ser nuestra guía. Lo primero que hicimos fue entrar en un plató donde grababan uno de los programas de Canal 8DM. Allí nos sacaron unas cuantas fotos y nos dijeron que una de ellas saldría el sábado siguiente en el periódico.

Después entramos en el plató principal. Entonces Isabel pidió un voluntario y yo me ofrecí. Tuve que hacer de presentadora y un compañero de mi clase, que se llama Eduardo, fue el cámara (con cascos y todo). Aprendí que los presentadores siempre están mirando a la cámara, porque allí les aparecen unas letras que van llevando hacia arriba o hacia abajo, más deprisa o más despacio, con unos pedales que van apretando con los pies, pero como yo no llegaba, me los pusieron arriba y lo hice con las manos.

Más tarde pasamos a la sala de control o de producción, allí había un señor viendo lo que estaban emitiendo en ese momento, para ver si había demasiada luz u otras cosas y dar las órdenes para corregirlo y que todo se viera bien.

Para grabar programas hay unas cámaras llamadas robóticas y otra cámara más grande que maneja un señor. Las cámaras robóticas se controlan desde la sala de control; por ejemplo, si quieren que enfoquen más a la derecha, mueven una palanca hacia ese lado, y si quieren más a la izquierda la mueven hacia el otro (como con los coches teledirigidos de juguete). La otra cámara, la grande, la controla y mueve un señor que se agarra a ella con una especie de manillares, y que además tiene que llevar unos auriculares para que desde la sala de control le digan que enfoque más a la derecha, más a la izquierda, más cerca, más lejos…., como tenía que hacer mi compañero Eduardo.

A continuación pasamos a una sala llena de periódicos. Desde el primero que hicieron en el año 1902 hasta el de hoy en día. En esa misma sala también había una máquina grande y muy rara que se llama “Linotipia”, que era con la que se hacían antiguamente los periódicos, letra a letra, como en una imprenta.

Justo al lado estaba otra sala muy grande donde estaban los periodistas trabajando y recibiendo noticias en sus modernos ordenadores. Por cierto, había uno que tenía de salva-pantallas un chimpancé con gafas leyendo El Diario Montañés, estaba muy gracioso.

Por último entramos en un sitio muyyy grande, en el que había unas máquinas también muyyy grandes y muchos rollos de papel, ya no grandes, sino enormes. Esa máquina con la que se “fotocopian” o imprimen los periódicos se llama rotativa, pero a la hora que fuimos nosotros estaba parada porque funciona por la noche para que podamos tener en los quioscos el periódico desde por la mañana muy temprano.

Y así acabó nuestra visita, que me gustó mucho porque vimos cómo se hacen los periódicos y los programas de televisión. Fue muy entretenido.

Trabajo original