El fútbol, deporte rey por antonomasia en este país, sufre en estos momentos una grave crisis tanto en sus organismos internos como en todo lo que está a su alrededor (television, público, espectáculo…). ¿Cómo se ha podido llegar a esta situación? Sin duda es un cúmulo de acciones y decisiones erróneas y mal precisadas que han conducido a un deporte que de por sí genera muchísimos ingresos a una situación no menos que muy preocupante.
Les pongo en antecedentes. A finales de 2003 comenzó un juicio en el juzgado de instrucción número 47 de Madrid al que asistieron como imputados dos miembros importantísimos de la Federación Española de Fútbol: el vicepresidente económico, Juan Padrón, y el administrador general de la entidad, José María Castillón, que eran procesados por una supuesta malversación de los fondos públicos de la FEF (Federación Española de Futbol).
Esta noticia era el culmen de una mala gestión en los últimos años de mandato del presidente Ángel María Villar, que desembocó en una gran disputa electoral entre el mismo Villar y su rival en las elecciones para la presidencia de la Federación, el presidente de la AFE (Asociación de Futbolistas Españoles), Gerardo González, que acabó con la victoria, un tanto inesperada por su mala gestión, de Ángel María Villar.
Esta victoria no apaciguó los ánimos en el fútbol español. De hecho, los enervó un poco más debido a las acusaciones de los vencidos de fraude electoral y de una supuesta compra de votos del ganador. Y esto es un problema muy grande, ya que la Federación Española está gobernada por un presidente que está acusado por la opinión pública de supuestos delitos económicos y de aprovecharse de su rango como presidente del fútbol español y de ser un importante miembro de la UEFA para conseguir ciertas dietas para utilizarlas en sus propios “quehaceres”.
Pero todos estos problemas dentro de la federación no sólo son la pata donde cojea el fútbol español, sino que también hay otros motivos que conducen a esta crisis. Uno de ellos, por ejemplo, es el endeudamiento cada vez más grande de la mayoría de los equipos españoles, debido a una subida exagerada de los presupuestos anuales (sobre todo en el plano de los fichajes) y la bajada considerable de los ingresos (debido a que las televisiones cada vez ven menos rentable el fútbol y bajan las ayudas). Esto ha hecho que equipos que no consiguen los objetivos de una temporada y descienden o no llegan a competiciones europeas provoquen en su economía una quiebra casi inmediata debido a que no pueden hacer frente a todos los gastos. Y, ¿quién es el responsable de todo esto? Pues podemos considerarnos todos un poco debido a que desde los altos mandos hasta un simple aficionado están llevando al fútbol a una situación límite y esto es así debido a las malas gestiones deportivas y también a las menguantes asistencias a los campos de fútbol que provocan eso, que el fútbol llegue a un momento límite en donde o cambia o se verá avocado a la desaparición. Y ¿dónde buscar las soluciones a esto? Está claro que la solución no va llegar de la noche a la mañana, ni tampoco vendrá de manera celestial. La solución debe ser la concienciación general de que el fútbol debe volver a unos cauces normales y dejar de tener los exagerados gastos en jugadores, fichas, marketing…. y volver un poco a los tiempos de antaño, donde lo importante de los clubes eran los aficionados y también la principal base de ingresos.
El fútbol poco a poco, y con el paso del tiempo, se ha convertido más que un deporte en un negocio y quizás ahí este la moraleja de todo el problema. El fútbol últimamente ha entrado en una dinámica en la cual los equipos grandes (con grandes ingresos y que pueden hacer frente a grandes esfuerzos económicos por un jugador) han desvirtuado poco a poco la competición y provocando que otros equipos, quizás con menos ingresos, intenten emular a los grandes avocando su economía a una irreparable quiebra. Personajes como Roman Abramovich, magnate ruso presidente del Chelsea FC, y el mismo Florentino Pérez, presidente de ACS y presidente del Real Madrid CF, han llevado el fútbol al campo del negocio, del marketing, de la publicidad, provocando que el fútbol pueda considerarse, más que un deporte en el que se enfrentan dos colores, una lucha entre un coloso y un débil que deriva en una bajada del espectáculo e igualdad que han llevado a la liga española a considerarse como la mejor liga del mundo.
En conclusión a todo lo expresado anteriormente me gustaría añadir que para solucionar todo esto tiene que llegar alguien a los máximos organismos del fútbol español que decida limpiar la mala imagen de este deporte, empezando por eliminar a ciertos personajes que sólo buscan la ganancia personal y no luchan por el beneficio del fútbol en general. Cuando esto ocurra llegará un momento, dentro de varios años, que este deporte limpia su imagen de nuevo y vuelva a llegar el momento en el que sólo se escuche en la prensa de este país ¡GOL!.