Estamos colaborando en un proyecto solidario llamado ‘Mobokoli’, cuyo objetivo es la construcción de una escuela en Kinshasa. ‘Solidaridad 400’ es un proyecto de la Compañía de María en su 400 aniversario que nace con el objetivo de hacer real la solidaridad a través del apoyo a alguna o algunas de las obras o proyectos que están dando respuesta a necesidades educativas urgentes en el mundo.
La República Democrática del Congo se encuentra en la actualidad en una profunda crisis social, económica y política. Es uno de los 20 países más pobres del mundo.
Desde 1996 se ha dado un largo período de crisis política, agravada por una serie de conflictos armados que implican a diversos países africanos y se calcula que en ella combaten más de 45.000 niños soldados.
El país vive una crisis económica brutal que ha producido un drástico recorte en el gasto en educación, sanidad y prestaciones sociales de la población.
El 90% de la población se halla bajo el umbral de la extrema pobreza y tiene que pagar los servicios educativos y sanitarios del país.
Por estos motivos se ha elegido la República Democrática del Congo como lugar para poner en marcha un proyecto Solidaridad 400 denominado Mobokoli.
Mobokoli (palabra lingala, la lengua de Kinshasa, que significa la mama que ayuda a crecer) es un complejo escolar que consta de una escuela primaria, una escuela preescolar, una escuela secundaria, una sala polivalente, una biblioteca y una casa de profesores. Se va ha construir en el barrio Selembao en la capital del Congo, Kinshasa.
Los objetivos son:
- Mejorar el acceso de los niños/as, sobre todo niñas, a la educación preescolar, primaria y secundaria en el barrio de Selembao, facilitando un acceso a un programa de alfabetización.
- Crear un espacio abierto para que los jóvenes puedan realizar actividades recreativas y culturales.
- Mejorar la situación económica de los adultos sobre todo de las mujeres.
Porque estamos entusiasmados con este proyecto ya colaboramos en un mercadillo solidario que se celebró el día de la Niña María (una de nuestras fiestas) y nuestros padres también lo hicieron en la colecta de la Eucaristía de Navidad. Todo el dinero que recojamos en las diferentes campañas de este curso estará destinado a este proyecto.
Queremos apoyar la construcción de este centro para que sea una realidad y porque estamos convencidos que sólo a través de la cultura podremos conseguir un mundo más justo y mejor.