Nuestro entrevistado es Miguel Angel Revilla Roiz, secretario del Partido Regionalista de Cantabria y presidente del Gobierno regional. Hemos solicitado su colaboración para esta entrevista hace tan sólo una semana y, desde el principio, la colaboración de su gabinete ha sido plena. Pretendemos conocer al hombre, palpar esa cercanía de la que ya estamos siendo testigos, y charlar con él de esas cosas que extrañamente ocurren, porque ocurren, pero que todos ven distintas.
Nombre: Miguel Ángel Revilla Roiz.
Lugar de nacimiento: Polaciones (23-01-1943)
Estado civil: Casado.
Estudios: Licenciado en Ciencias Económicas y diplomado en Banca y Bolsa por la Universidad del País Vasco.
Ocupación: Presidente del Gobierno de Cantabria desde el 27 de junio de 2003.
Trayectoria: En 1976 creó la Asociación para la Defensa de los Intereses de Cantabria (ADIC), y dos años después el Partido Regionalista de Cantabria (PRC), con el que es diputado desde 1982. En las legislaturas 1995-1999 y 1999-2003 fue vicepresidente y consejero de Obras Públicas, Vivienda y Urbanismo.
Además de político, ha sido director de banco y profesor de la Universidad de Cantabria.
El presidente tiene dos ruedas de prensa, va a asistir a la entrega de premios de un concurso nacional de periodismo en el que han sido galardonados tres centros de Cantabria, entre ellos el nuestro, y varias reuniones.
Son poco menos de las 11,00 y ya estamos entrando en el palacio de Puerto Chico. Un recepcionista nos recibe y nos lleva hasta una elegante sala de espera con banderas y placas en agradecimiento al Presidente.
Borja y Pablo retocan y se reparten las preguntas mientras que los demás, nerviosos, observamos las placas que decoraban el salón. A las 11 en punto el secretario nos recibe y nos indica amablemente que tendremos sólo 30 minutos. por motivos de agenda.
En la puerta del despacho está el presidente, nos recibe y saluda mientras se pone su americana. Es un despacho claro y amplio, pero sencillo. Mucha carpeta, cierto orden, mesa de trabajo, mesa de reuniones, teléfonos, cuadros, fotos de sus hijas, periódicos, más fotos. Se percibe un olor inconfundible a habanos y el ajetreo propio de quien mucho trabaja.
Es un hombre cercano. Ha recibido con una sonrisa un pequeño obsequio, algo propio de Torrelavega, y nos conduce a una segunda estancia, donde nos quedamos solos. Es paciente, observa y nos serena, hasta nos ayuda con las grabadoras. Mira todo y nos estudia, pero no hay el mínimo atisbo de tensión o de prisa.
Pregunta.- Una persona como usted nacida en Polaciones, el 23 de enero de 1943. ¿Qué recuerdos tiene del pueblo en el que nació?
(Antes de contestar nos hace un gesto de espera y abandona la sala. Nos hemos quedado un poco desconcertados, pero el intermedio es brevisimo. Revilla vuelve blandiendo en su mano dos magníficas y amplias fotos de Polaciones que muestra de forma orgullosa. Mientras nos señala en la foto la que fue su casa, nos empieza a contar…)
Respuesta.- Bueno, me acuerdo de las cosas de hace bastante tiempo, desde los 6 años hasta los 11 que me fui de allí, mejor que las que me han pasado después de vivir allí. Nacer en Polaciones en el año 1943, para los que sois del entorno urbano, era estar sin carreteras, sin luz, con nevadas de cuatro metros. De jóvenes teníamos que ir con las vacas, las ovejas.
En Polaciones sólo se trabaja la patata y la ganadería, pero ganadería tudanca. Es una zona muy pobre.
Guardo unos recuerdos muy buenos, sobre todo de la dureza de la zona, el nacer allí, estudiar; eso luego te fortalece para la vida, ya que no es lo mismo nacer en medio de las comunidades que en Polaciones, que es una de las zonas más duras, donde más nieva, los inviernos duraban cuatro meses aislados. Siempre que puedo me escapo para volver a ver mi pueblo. Me acuerdo también de las cosas que hacía de pequeño, como ir a pescar al río, ir a la escuela ….
P.- Casado y con tres hijas, ¿los mejores momentos de su vida los vive junto a su familia?
R.- Muy poco, debido a que yo salgo de noche por la mañana y vuelvo también de noche justamente para cenar. Ahora no, porque anochece más tarde.
Yo me levanto todos los días a las 6,45, a las 7,30 salgo y llego a casa sobre las 21,30 o 22,00 horas. También es verdad que yo nunca ceno fuera de casa para poder estar más tiempo con mi familia. En esta vida hay que sacrificar la familia, pero los fines de semana que tengo libres los procuro pasar con ella. Mi hija pequeña tiene seis años y hay semanas que sólo me ve los sábados y los domingos.
P.- ¿Qué le gusta hacer en su tiempo libre, si en realidad le tiene?
R.- Pues ahora no tengo tiempo libre, no me puedo coger vacaciones y, encima, ahora los sábados y domingos tienes la agenda completa, ya que es cuando se celebran más actos (homenajes, cenas, romerías).
Pero si tengo un rato libre lo que más me gusta es pescar. Era muy bueno pescando truchas, pero ahora no voy ni dos veces al año. Todavía este año no he ido nunca y el año pasado fui solamente dos veces, pero me encanta ir al río, pero no a cotos, sino a zonas libres. Porque lo que me encanta de la pesca es ver los paisajes preciosos de las riberas de Cantabria, pescar en los ríos de la Vega de Pas, en Polaciones. Porque cuando vas a pescar ves paisajes, la fauna, los robles, los acebos, es una maravilla.
Y otra cosa que me gusta mucho es coger setas, yo soy setero. Este año no he podido ir y ya casi se ha acabado la época de ellas, pero yo conozco varios setares que no conoce nadie, así que allí se habrán quedado.
También me gusta ir a ver al Racing y una partida de bolos. Me encanta ir a ver los bolos. Al cabo del año voy a ver 4 ó 5 partidos, pero me gusta ir, por ejemplo, a las boleras de Puente San Miguel, Oruña, Villacarriedo, Selaya…, esas boleras que están en los pueblos, donde estás rodeado de los árboles y de toda la gente del pueblo.
(Siempre he tenido la sensación de que un político es un profesional frio, un vendedor de nada, por eso me extraña sentarme a una mesa con uno, que además asume responsabilidades importantes, y verle brillar los ojos con cosas que aparentemente son insignificantes, pero que revelan el valor humano de quien las dice. Y esto último es lo que nos está pasando con Revilla)
P.- ¿Ser presidente de Cantabria le ha creado más amigos o enemigos?
R.- Hay gente que le parecerá que lo hago muy bien y otros que muy mal. El político es una persona que lo hace por vocación. Cuando me preguntan en las encuestas cuál es mi profesión, yo no digo que soy economista, ni que he sido director de banco, porque a mí lo que más me gusta es lo que estoy haciendo. Yo he sacrificado todo por esto, porque yo soy un político vocacional, y tienes que intentar estar conforme contigo mismo, llegar a casa por la noche y meditar ¿he hecho todo lo que he podido?, ¿lo he hecho de una manera honesta, creyendo que es lo mejor?.
Para mí esto es más importante que lo que me puedan decir los demás y sé que, haga lo que haga, habrá una parte de la población que, por ideología política o por otros motivos, le parecerá mal mi actuación, pero yo me siento tranquilo en conciencia. Así que lo más importante para mí es llegar a casa y decir que he trabajado a tope, que lo he hecho bien y que he hecho todo lo posible. Entonces tendré mucha gente que me quiere (que la tengo), pero también tendré gente que diga que no tengo razón.
En política las unanimidades son imposibles, ni aunque hicieras todo lo que la gente esté soñando. Siempre habrá alguna persona que prefiera a otro porque tu no le caes bien, pero yo intento hacerlo lo mejor posible, yo hago lo que puedo, estoy volcado en este trabajo esforzándome muchísimo. Luego que la gente juzgue ya que para eso, afortunadamente, estamos ante una democracia y cada cuatro años la gente tiene la oportunidad de votarte con V o con B.
P.- En 1976 creó ADIC, la Asociación para la Defensa de los Intereses de Cantabria, ¿gracias a ello se adentró en el mundo de la política o su interés venía de antes?
R.- No de mucho antes. Cuando estudiaba en la universidad fui el delegado de la facultad de Económicas y luché por la restauración de la democracia en la universidad cuando había un sindicato que se llamaba SEU, y eso me ocasionó muchos problemas con la policía. Yo siempre he querido ser político, desde los 16 años tenía una vocación, como aquel que desde pequeño le gusta pintar, pues yo soy un político vocacional.
Cuando yo trabajé de director de banco no querían que me fuera porque les hacía ganar mucho dinero, pero lo que a mí me gustaba era la politica. Eso sí, en Cantabria. Yo no me veo trabajando fuera de mi tierra. Si me propusiera, por ejemplo Zapatero, un cargo nacional, tal que Ministro de Economía, yo diría que no. Porque mi vocación se reduce a Cantabria, no es que no me interesen los problemas del mundo y de España, sino que yo soy un político que he nacido aquí y estoy muy ligado a esta tierra, a su geografía, su gente, pero yo sería incapaz de hacer esto en Extremadura o Andalucía. Vamos, que sería incapaz de hacerlo en otro lugar. Tendría que tener mucha necesidad para irme de aquí, porque me siento muy mal cuando salgo de Cantabria. Cuando voy a Madrid procuro ir por la mañana y volverme por la noche, intento no dormir allí, me agobia. Para mí como Cantabria no hay ningún lugar.
P.- La creación del PRC en 1978 fue su siguiente paso en el plano político, ¿luchó mucho para poder defender los intereses de ese nuevo partido?
R.- Si, y a través de él los de Cantabria. Nosotros creamos la asociación en 1976 justo cuando muere Franco. En ese momento se sabe que en España va a ver una democracia y eso va a traer consigo el fin del sistema centralista, un sistema por el que todo se decidía y ejecutaba desde Madrid. Para pedir cualquier carretera te mandaban al delegado del Gobierno, éste llamaba a Madrid y solicitaba permiso y dinero para algo que ellos desconocían, ralentizando y bloqueando muchas acciones que sólo desde nuestro conocimiento y cercanía se podian resolver.
Y después existía una división absurda que a mí siempre me llamó la atención cuando era pequeño y estaba en la escuela, en la que te enseñaban, por ejemplo que Castilla la Vieja estaba formada por Ávila, Segovia, Santander… y yo decía ¿esto quién lo habrá inventado? No existe una cohesión social, ni económica ni nada de nuestra tierra con estas provincias. Se podría, en todo caso, argumentar una similitud entre Asturias y Cantabria, ya que están más cercanas, pero lo otro a mí no me entraba en la cabeza. Por eso pensé que si se iba a descentralizar España, Cantabria tenía que ser una Autonomía.
Otra cosa que me llamaba la atención era nuestro consentimiento a que durante muchos años se nos llamara Santander cuando el nombre de Cantabria era muy importante e incluso los vascos durante siglos lo estuvieron reivindicando para ellos. Cuando estudiaba me llamaban santanderino, pero yo decía que no, que era de Polaciones, que yo era cántabro. Santander es una ciudad maravillosa, y estamos muy orgullosos de que sea nuestra capital, pero no podiamos olvidar que Cantabria no se reduce a ella.
Todo esto os lo explico, porque a muchos jóvenes les parecerá que lo hemos tenido toda la vida, y no es así. Nuestra identidad la hemos defendido entre todos con mucho esfuerzo, y entre todos la debemos mantener. Por eso luchamos para conseguir el nombre, la autonomía, la descentralización… y por eso creamos primero la asociación cuando no estaban legalizados los partidos políticos, una asociación que creara ese ambiente para que Cantabria fuera una sola autonomía. Tuvimos que aclarar a mucha gente que no era algo independentista lo que queríamos hacer.
Europa es la Europa de las Regiones: Ayuntamiento, Autonomía y Estado. La diferencia que tenemos los regionalistas de los nacionalistas es esa, que no queremos la independencia, queremos una autonomía que pertenezca a un país como es España. Siendo grande España sería grande Cantabria. A base de muchas horas y muchos kilómetros (incluso quemé dos coches) fui pueblo por pueblo explicándoles lo que era preciso para Cantabria. En algunos pueblos me escuchaban 20 en otros igual ninguno, pero persistimos para defender lo que creiamos beneficiosos para todos.
Todo esto hasta el año 1979, en que obtuvimos la Autonomía de Cantabria. Al votarlo dos tercios de la población y de los ayuntamientos, proceso iniciado por el Ayuntamiento de Cabezon de la Sal, y en el que fue importante la colaboración de Santander, que dispone de una amplia población y que nos permitió conseguirlo. Ahora no necesitamos un Delegado de Gobierno para que consulte a Madrid… ahora el Presidente del Gobierno sabe dónde está el pueblo dónde hay que hacer la carretera, se preocupa de que todos los pueblos tengan agua, luz… porque el Presidente conoce todos los municipios de Cantabria.
P.- Cuando usted salió presidente, gracias al pacto con el PSOE, parte de la opinión pública de la comunidad quedó algo perpleja al ver cómo el candidato con menos representación en el Parlamento conseguía el cargo de Presidente. ¿Qué es lo que hizo que usted llegara a ocupar el máximo puesto en la región?
R.- Eso es un desconocimiento de mucha gente. Quien vota al presidente son los diputados, son los parlamentos o ayuntamientos los que votan al alcalde o al presidente del Gobierno.
En Cantabria se eligen 39 diputados y, de esos 39, aquel que consiga 20 nombra al Presidente. En este caso yo conseguí 21, gracias al apoyo del PSOE al presentar unos programas en los cuales los dos estábamos de acuerdo. Y yo asumí el reto de ser presidente. Gracias a esta mayoría se están aprobando todos los proyectos del Gobierno y hemos conseguido la estabilidad política. Pero es totalmente democrático, aunque sea un poco extraño, que el que menos parlamentarios tenga salga presidente. Lo más importante en esto es llegar un acuerdo en los programas que se presentan.
Yo siempre dije en la campaña electoral que quería ser presidente. Yo siempre he dicho que para mí era más importante ser presidente de Cantabria que serlo de Estados Unidos o de España. En todo caso, si la ley electoral no gusta, los que están en Madrid pueden mañana mismo cambiar la legislación. Pero es más fácil decir que el perdedor… Yo no soy un perdedor. Mi partido ha luchado en las elecciones con dos grandes formaciones apoyadas por lideres nacionales y con todo el respaldo de los medios de comunicación. Y aun así hemos conseguido el 20% de los votos, y con más respaldo electoral que en las anteriores.
P.- Usted se caracteriza por ser una persona a la que le gustan todos los eventos, fiestas regionales, etcétera, lo que ha hecho en algunos casos que se le califique de persona folclórica, es decir, que le gusta más acudir a una fiesta que a un acto político dejando esto último en manos de la vicepresidenta, Lola Gorostiaga. ¿Qué opina sobre esto y sobre las personas que le califican de esa manera?
R.- Es un juicio que hay que admitir, pero a mí no me hace cambiar porque cada uno es como es. El que me conoce sabe cómo soy y el escuchar cuando era pequeño cantar, tocar la pandereta, el rabel… pues siempre me ha gustado y ahora me sigue gustando. Ir a ver un partido de bolos, una feria… Hay veces que me dicen: «Miguel Ángel cántanos algo» y yo canto; no creo que eso sea ningún delito aunque lo hago muy mal. El tema de las albarcas, ¡si yo he tenido albarcas hasta los 11 años!. ¿Que opinarían de mi si perdiera mis costumbres, si renunciara a lo que me significa, si, por ejemplo, dejara de usar albarcas, sólo por ser ahora presidente? Cuando era pequeño para ir al colegio, para combatir el frío del invierno y para ir a la escuela cuando nevaba teníamos en la puerta de casa los esquíes con las albarcas. ¿Por qué tengo que renunciar a mi identidad?. Me pueden juzgar por mi labor de gobierno, pero por ser cántabro no. Como decirme que si voy en taxi a Madrid. Es lo más cómodo, y lo más barato. Puedo ir a Madrid en el día, me muevo en taxi y regreso por la noche. Si voy a Madrid y visito Moncloa, es para beneficio de los ciudadanos de esta región, no para hacer turismo.
Si llego un día pronto, como por ejemplo el otro día a Valladolid, me voy a dar una vuelta por la ciudad, a conocerla sin tener problemas con los guardaespaldas ni nada y al trabajo voy y vengo todos los días en mi coche. Y no soy el único. Hace pocas fechas estuve de visita en la región francesa de Aquitania, cuya capital es Burdeos. Su presidente actúa de manera informal, se mueve a su casa y a su trabajo en su coche, sin guardaespaldas y mantiene sus costumbres de siempre. ¿Y por qué no?. Y con todo respeto hacia las personas que deben llevar guardaespaldas, yo me niego. El día que yo tenga que usarlos y me tengan que acompañar, dejaré la política y lo dejaré todo. No lo podría soportar. No podría explicar a mis hijas que para acompañarlas al parque o para ir a su colegio necesito de alguien que me cuide porque no puedo moverme en libertad. Pero al margen de todo eso, cuando tengo que ir a algún sitio a defender a Cantabria, sé que estoy representando correctamente a todos los cántabros. Yo soy así.
P.- A los jóvenes, casi seguro, nos interesan más los deportes que la política y andamos un poco confundidos con el descontrol que se está viviendo en el ámbito deportivo de nuestra comunidad con primas y ayudas a algunos equipos, como es el caso del Lobos Cantabria. Este club ha recibido cantidades importantes de dinero procedentes del Gobierno autónomo que ahora no se sabe dónde han ido a parar ni en qué se han invertido. El Gobierno tendrá conciencia del problema, ¿pero sabe dónde está realmente el dinero?
R.- En ese caso hay una auditoría. De otro lado yo no estoy de acuerdo con el hecho de que el Gobierno se meta en el Racing, pero en este tema lo que sé es que si no actuábamos el Racing desaparecía. Y yo siempre he estado en desacuerdo con esto incluso cuando hice el primer pacto de Gobierno con el PP, cuando pedí que el Gobierno vendiera su participación en el Racing y así se hizo, se vendió a una familia cántabra que todos conocemos y hasta ahora. Luego el club precisó dinero, se decidió una ampliación de capital y el gobierno tuvo que acudir a ella porque nadie quería comprar las acciones del Club, ninguna empresa cántabra quería comprarlas. No es un desembolso económico, es un crédito para que el Club se salvara. Y algo que dejé claro es que antes de la temporada siguiente, el Gobierno no tiene que tener nada que ver con el Racing.
El Gobierno da ayudas a todos los equipos de Cantabria y después existen unas primas. Lo que hagan los Clubes con ello no lo sabemos. Lo ideal sería que los grandes clubes se administraran por si solos y que no necesitaran ayudas estando como están en la élite, permitiéndonos dirigir todo el dinero hacia el deporte base. Pero no podemos arriesgarnos a que ciertos equipos de élite desaparezcan o acaben en categorías muy inferiores, porque ellos ofrecen un rendimiento publicitario a la región y generan ingresos indirectos vía turismo.
Aquí el proyecto que presentaron los Lobos fue un proyecto para que el equipo volviera a jugar en la LEB. Así nosotros podíamos tener un equipo de fútbol en 1ª, otro de baloncesto en 1ª y otro de balonmano en la categoría de honor.
(Después de plantearle en reiteradas ocasiones el problema que estaba pasando en Los Lobos, el presidente de Cantabria no contestaba exactamente a lo que le preguntamos por lo que deducimos que el Gobierno está dolido con el Club debido a que el proyecto que presentaron para que recibieran ayudas de Cantabria no se ha cumplido al pie de la letra y no saben en realidad dónde ha acabado ese dinero que prestaron).
P.- En estas fechas Cantabria está viviendo uno de los peores momentos en la ganadería: manifestaciones, cierre del Mercado Nacional de Ganados, actos vandálicos contra funcionarios de la Consejería… ¿Qué medidas piensa tomar la presidencia del Gobierno? ¿Habrá negociación con todos los sindicatos, incluyendo a los que apoyan a los ganaderos como es el caso de UGAM – COAG?
R.- No se puede negociar nada. La Brucelosis es una enfermedad gravísima de un contagio feroz que Europa ha erradicado. A nosotros el año pasado nos dijeron desde la UE que si no bajábamos el porcentaje de Brucela en Cantabria nos quitarían todas las ayudas que los ganaderos estaban recibiendo. Y por eso estamos intentando erradicarla y parte de la gente que no quiere es porque tiene intereses en ello. Mirar, las vacas con la enfermedad con Brucelosis se pueden comer e incluso vosotros las habréis comido muchas veces, pero el problema que existe es que una vaca infectada por la Brucela cuesta 40.000 pesetas mientras que la venta de una vaca sana cuesta cien mil. Y la carne se os vende a vosotros al mismo precio. Y lo que vamos a hacer nosotros es ‘chamuscar’ a todas las vacas infectadas pero las vamos a pagar igual que si las vendieran a un matadero. Se van a quemar todas y con las medidas que nos han mandado tomar desde Europa hemos bajado de un 5,8 % al 1,6 % en un año estando la media europea en el 0,4 % . Y veréis dentro de poco cómo en España se van a tomar las mismas medidas que se están tomando en Europa.
Las ayudas que estamos dando son de 860 € por cada vaca repuesta, no dejamos a la gente sin nada. Son seis millones de pesetas a las explotaciones con 50 vacas contagiadas. La Brucela es una plaga y tenemos que erradicarla como sea. Y hay muchas vacas en estos momentos que están inmovilizadas hasta ver si en la 2ª prueba esas vacas dan negativo de brucelosis.
Si nosotros no hubiéramos hecho esto, ¡Europa nos borra del mapa! Nos cierran el Mercado de Torrelavega, no nos dejan sacar ganado de nuestras fronteras… la Cámara Agraria se ha reunido y está de acuerdo. La Cámara Agraria está representada por todos los sindicatos de Cantabria y el 70% de los ganaderos, y a través de ella han estado representados en estas negociaciones, y la mayoría han estado de acuerdo en estas medidas. Y esto no ha afectado a los Ganaderos, afecta a los que están en el ‘Mercado del Trapicheo’ que compran a un precio y venden a otro habiendo unos 2000 millones de pesetas de diferencial entre el precio real y el de compra por tener brucelosis. Con ese mercado había que acabar.
Es parecido a lo del POL: se perjudica a mucha gente pero hay que tomar medidas para que cada uno no haga lo que quiera y perjudique a los demás. No podemos estar a consultar a todo el mundo.
(Tras esta respuesta, que es básicamente muy convincente sí que nos ha quedado una duda. Para que los animales se dirigan de una explotación a otra o para que sean dirigidos a los mataderos, son necesarios una serie de papeles y certificados que los veterinarios facultativos de la Consejería de Ganadería del Gobierno de Cantabria facilitan y proporcionan a los ganaderos. Según Revilla, al cabo de los años se han ido matando muchas reses infectadas que han sido vendidas después para el consumo. La pregunta que nos hacemos es cómo los Veterinarios de la Consejería han permitido que estos animales viajen a los mataderos y después puedan ser consumidos si están infectados, y cómo estos desaprensivos han podido soslayar los controles de los mataderos).
P.- ¿Está usted al tanto de la polémica que existe en el sector de la caza mayor en Cantabria, entre las cuadrillas de Liébana y Polaciones con las de Iguña, Campoo, etcétera, por la denominación de local, regional, nacional y los privilegios que cada una conlleva?
R.- Eso es un tema complicadísimo de un consenso imposible y que cualquier medida que se tome va a perjudicar a algunos. En este tema no quiero yo entrar, ya hay técnicos trabajando en ello y es muy difícil conciliar en ese tema a todo el mundo, ya que todos tienen un punto de razón.
Nuestros treinta minutos se han convertido en 55. Pero el presidente no nos ha interrumpido. Nuestro coordinador nos conmina a concluir y nos pide comprensión hacia la agenda del presidente. Revilla nos ha acompañado hasta la salida y nos ha permitido fotografiarnos con él.
La charla continúa por el pasillo, y en ella interviene la consejera de Educación Rosa Eva Díaz Tezanos, que nos saluda mientras va camino de una rueda de prensa.
Los juicios políticos no son nuestro objetivo y, posiblemente, sean muy discutibles muchos de los términos en que ha discurrido nuestra conversación. Pero de lo que estamos seguros es que hemos compartido un instante de nuestra vida con un hombre honesto, con un gran amante de Cantabria y con una gran persona.
Trabajo original