El proyecto de Sniace de construir una central eléctrica térmica de ciclo combinado en Torrelavega, muy cerca de un grupo de viviendas, ha desatado la polémica. Pero, ¿sabemos realmente cómo funcionan estas centrales y cuáles son sus ventajas e inconvenientes?

Una central eléctrica térmica de ciclo combinado es un tipo de central de producción de energía eléctrica, que produce electricidad a partir de la combustión de materiales, normalmente gas natural.

Para obtener energía eléctrica a través de una central de ciclo combinado, lo primero que hay que hacer es almacenar el combustible en depósitos, desde donde a través de una tubería de distribución pasa a una caldera, en la cual se quema, para que caliente unos tubos por los que circula agua alrededor de las paredes de la caldera, que convierten el agua en vapor y mueve una turbina que a la vez mueve un generador que produce electricidad que se almacena en un acumulador eléctrico.

Lo mismo ocurre con los gases que salen de la caldera, que pasan por otra turbina, la cual mueve otro generador que produce electricidad que se almacena en el acumulador eléctrico.

Cuando se necesita la electricidad almacenada en el acumulador eléctrico, se procede a su transporte en formato de alta tensión gracias a un alternador eléctrico, un transformador y una subestación eléctrica, mediante tendidos eléctricos aéreos de cables o mediante cables soterrados, bajo tierra, que se transforma a formato de media y baja tensión para su utilización en el ámbito doméstico e industrial.

Lo mismo ocurre con los gases que salen de la caldera, que pasan por otra turbina, la cual mueve otro generador que produce electricidad que se almacena en el acumulador eléctrico.

Cuando se necesita la electricidad almacenada en el acumulador eléctrico, se procede a su transporte en formato de alta tensión gracias a un alternador eléctrico, un transformador y una subestación eléctrica, mediante tendidos eléctricos aéreos de cables o mediante cables soterrados, bajo tierra, que se transforma a formato de media y baja tensión para su utilización en el ámbito doméstico e industrial.

Las centrales térmicas de ciclo combinado producen cada una de media 800 MW.
En España hay aproximadamente 320 centrales de ciclo combinado operativas y otras 40 en ejecución o proyecto, que son capaces de generar electricidad para una población de 18 millones de personas, a pesar de los muchos grupos de ecologistas y vecinos que se oponen a estas centrales. Es el caso de Torrelavega, ciudad que supera los límites permitidos por la Unión Europea de CO2 y azufre en la atmósfera casi 60 veces al año y en la que tres grandes empresas están asentadas, ASPLA, SOLVAY e SNIACE. Las dos primeras tienen una central de ciclo combinado cada una y la tercera tiene dos, a menos de 15 metros de una iglesia y un cementerio y a 25 metros de las viviendas. Además, esta última pretende hacer junto con otra empresa una gran central térmica en una gran explanada cercada por viviendas en un lugar que no admite más contaminación.

Más información:

http://www.elmundo.es/elmundo/2006/07/10/ciencia/1152534984.html

Trabajo original