Dos alumnos nos muestran visiones distintas sobre una salida al Vertedero de Meruelo que nos ha hecho reflexionar sobre la importancia de reciclar. ¿Sabéis la cantidad de basura que generamos al día y cómo la separan? Conocerlo nos impone a todos una reflexión sobre la situación de nuestro planeta y de nuestra implicación en ello.

EL VERTEDERO
Jaime Lavín Gullón

Lo visto: Vi un centro de recogida de sólidos urbanos, en el que se separaban la materia orgánica de la inorgánica. Había numerosos aparatos destinados a la separación de sólidos, por ejemplo:
Un cilindro era encargado de separar el material orgánico de lo inorgánico, este consistía en dar vueltas filtrándose lo orgánico y el resto quedaba dentro del cilindro. Estaba formado por numerosos rejillas de medida 9×9 centímetros. Esto facilitaba la filtración.
Otro de los aparatos que aparecen en esta planta son las cintas transportadoras, que trasladaban lo orgánico.

Lo curioso: La capacidad que tenía el vertedero de almacenamiento es cinco millones de toneladas, lo que equivale a la población aproximadamente de Santoña. Los materiales orgánicos formaban una serie de capas donde eran aplastadas por apisonadoras. Estas contenían una serie de ruedas formadas por unos piñones, llamados Patas De Cabra.

Lo imprescindible: La mayoría de los trabajadores se encargaban de separar la materia orgánica de la inorgánica de manera manual. Otra forma de separar los metales y los aluminios es con la magnetización, consistente en acercar el imán al metal.

Nota: El vertedero quedará lleno en el año 2028, cuando se convertirá en un pantano. El reciclado es imprescindible para una vida mucho mejor.

EL VERTEDERO DE MERUELO
David Sánchez López

El día 23 de febrero, en una salida complementaria organizada por los profesores, los alumnos de 3º ESO del colegio Santa María Micaela hemos visitado el vertedero de Meruelo. Aunque el tiempo no estuvo de nuestra parte y no pudimos realizar la visita de la misma forma que lo hubiéramos hecho si el tiempo nos hubiera sonreído, ésta concluyó de una forma satisfactoria.

Cuando llegamos, un chico nos explicó a lo que se dedican básicamente allí y nos puso un vídeo sobre ello.
Este vertedero es el más importante de Cantabria y a él llegan unas 25 toneladas de residuos orgánicos y cartones al día. Estas cifras parecen increíbles pero hay que tener en cuenta que estamos hablando de la práctica totalidad de los residuos producidos en toda Cantabria.

Después de ver el vídeo fuimos a una sala en la que se encontraba un panel que describía el recorrido de los residuos en cada parte del vertedero.

A continuación fuimos a los fosos en los que descargan los camiones y en los que se almacenan los residuos hasta que comienza su tratamiento. Justo cuando estábamos allí llegó un camión que descargó los residuos que transportaba en el foso.

En una primera fase los residuos pasan por una selección manual en la que se separa el cartón, los plásticos y los residuos voluminosos (que tienen un tratamiento diferente al de los residuos orgánicos) de los residuos orgánicos que siguen su tratamiento.

Después los residuos orgánicos de pequeño tamaño son separados de los de mayor tamaño que son triturados y luego almacenados todos juntos. Estos residuos de pequeño tamaño se dejan fermentar para producir compós que, aunque aquí no tenga mucha salida porque en Cantabria los campos se abonan con estiércol animal, en lugares como Madrid si que son utilizados.

Los residuos que no son utilizados para producir compós son acumulados en el vertedero. En función de la capacidad de este vertedero se estima que estima que en el 2024 esté lleno por completo. El vertedero cuenta con una capa arcillosa en su fondo para impermeabilizar el terreno y evitar que las sustancias tóxicas de los residuos se filtren a las aguas subterráneas. En las montañas de residuos orgánicos siempre hay gaviotas las cuales buscan alimento entre los residuos debido a que el número de peces cada vez es menor y por eso buscan alimento en lugares fijos y en los que tienen una mayor facilidad y posibilidad de alimentarse.
Se ha construido una central térmica al lado del vertedero, la cuál aprovechará los residuos orgánicos secos como combustible para producir energía eléctrica. Esta central producirá 10 megavatios de los cuales 2 se utilizarán para abastecer a la planta de Meruelo y los otros 8 para abastecer a la población. Estos 10 megavatios servirán para abastecer a 25.000 personas con industria incluida.

La planta de tratamiento de residuos de Meruelo controla la emisión de gases depurándolos antes de emitirlos a la atmósfera ajustándose así al protocolo de Kyoto.

La visita, aunque en un principio nos pareció un poco inútil, no lo es para nada. En ella aprendemos una cosa nueva como es el tratamiento de los residuos que nosotros mismos generamos, dándonos cuenta así de la importancia de separar en nuestras casas el papel del vidrio, de los envases y de los residuos orgánicos para evitar así un complejo proceso de separado. En ciertos momentos de la visita el olor no fue muy agradable (lógico, estamos en un vertedero) y algunos lo disimularon oliendo vaselina, gominolas o, simplemente, su ropa. Esto no es un dato muy importante con respecto a lo que es la visita en sí, pero todo hay que decirlo… Se trata de contar nuestra experiencia, ¿no?

Trabajo original