Con ‘La cámara oscura’, un trabajo preparado para la asignatura de Imagen y Expresión, los autores pretenden estimular, sin grandes inversiones, el descubrimiento del apasionante mundo de la considerada fotografía clásica.

 

 

1) Lo primero de todo es conseguir un recipiente, mejor si es metálico, que cierre herméticamente y hacer un agujero en su cara frontal no demasiado grande.

 2) Pintar de negro mate el interior del bote y de su tapa. Con ello conseguiremos evitar reflejos en la fotografía. 

3) Pegar en el agujero un trozo de cartulina, de manera que se puede abrir y cerrar el agujero. Esto nos servirá como objetivo . Pegar en el interior de la cámara una lámina de papel fotográfico (al fondo de la cámara oscura, lo más lejos posible del objetivo y con luz roja). 

4) Escoger algo que nos interese fotografiar y enfocarlo con el agujero abierto durante minuto y medio. Después, cerrar el agujero con la cartulina. Para que la fotografía salga bien, es necesario que se mantenga la cámara estable.

 5) Proceso de revelado: pasar el papel fotográfico por unos determinados recipientes con los siguientes líquidos, por orden: revelador, baño de paro (agua), fijador, limpieza (agua).
Tras este proceso obtenemos el negativo de la imagen. Los productos los podéis obtener en cualquier tienda de fotografía.

6) Obtención del positivo: colocamos papel fotográfico y encima el negativo. Los cubrimos con un cristal y los sometemos a una fuente de luz (cualquier bombilla de casa ). Ya tenemos el positivo gracias a nuestra cámara oscura.
Repetir el proceso de revelado como en el apartado nº 5 .

¡Eres un artista!

Trabajo original