Últimamente se está hablando mucho de la labor de los árbitros. Quizás es porque la gente se ha dado cuenta de que no siempre son los culpables de los éxitos y de los fracasos de los equipos. Aunque también es cierto que en la mayoría de los partidos, desde el fútbol base hasta Primera División, hay alguien que se acuerda de la pobre madre del árbitro, ya sea un jugador, entrenador, delegado… y, por supuesto, la gente de las gradas. Por lo tanto, yo, gran admiradora del trabajo de estas personas y, más aún, de Alfonso Pérez Burrull, he decidido entrevistarle para que os deis cuenta del encanto de persona que es. Y si con esta entrevista no lo percibís suficientemente, hacedme caso: es un hombre agradable, amable, simpático, gracioso… Realmente, yo no le veo capaz de favorecer ni de perjudicar a nadie.
Nombre: Alfonso Pérez Burrull
Lugar de nacimiento: Santander
Fecha: 15/09/1965
Profesión: Representante comercial
Ocupación: Arbitro
Debut en Primera División: 1997, partido Deportivo-Mallorca
Alfonso Pérez Burrull es, junto al también cántabro Fernando Texeira Vitienes, uno de los 24 árbitros que dirigen los partidos de la Primera División del fútbol español. Internacional en 14 ocasiones, asegura que los encuentros que recuerda con más cariño son aquellos dos en los que no mostró ninguna tarjeta. Pérez Burrull nos cuenta algunos detalles de su trayectoria y sus aficiones.
Pregunta.- ¿A qué edad empezaste y cómo?
Respuesta.- Empecé a los 15 años, porque era muy revoltoso y me expulsaban de clase. Un día un cura me vio por los pasillos y me llevó a arbitrar como castigo.
P.- ¡Qué forma más curiosa de empezar! ¿Y en qué partido estuviste más nervioso? ¿En tu debut? ¿Cuándo empezaste en Primera División? ¿En el primer partido como internacional?…
R.- La verdad es que no soy una persona muy nerviosa, pero mi debut como internacional en Italia fue muy emocionante.
P.- ¿Y qué piensas hacer cuando te retires?
R.- Lo pensaré el último año.
P.- ¿Qué partido es el que recuerdas con más cariño?
R.- En Primera División, el Mallorca-Betis y Betis-Alavés, porque han sido los únicos encuentros en los que no he sacado tarjetas.
P.- ¿Tenías algún ídolo de pequeño?
R.- Pues no. No tenía ídolos. Bueno, el que más me gustaba era Quique Setién.
P.- Entonces, ¿antes de arbitrar, jugabas al fútbol?
R.- Sí, pero era muy malo. Bueno, no; era un incomprendido (ríe)
P.- ¿Qué edad crees que es la ideal para comenzar a arbitrar?
R.- Cualquiera es buena.
P.- ¿Te gustaría que tu hija Leire también fuera colegiada?
R.- No sé; todavía tiene tres años.
P.- ¿Y qué es lo mejor que te ha pasado desde que comenzaste el arbitraje?
R.- Me ha aportado muchas cosas, pero quizás lo mejor es que me ha permitido conocer muchos países. Por ejemplo, el último país en el que he estado ha sido Arabia Saudí, pero no me ha gustado. Hay un gran contraste entre la miseria y la riqueza.
P.- ¿Qué consejo darías a aquellos árbitros que no consiguen subir de categoría?
R.- Que la cabeza la tengan siempre puesta en el siguiente partido, creo yo.
P.- ¿Podrías decirnos quién es el compañero de Primera División con el que mejor te llevas?
R.- Con el señor Medina Cantalejo.
P.- Y por último, la pregunta de moda del mundo del fútbol: ¿Qué opinas de que Fagianni, jugador argentino del Tenerife, esté en contra de que las mujeres estemos relacionadas con el deporte rey, ya sea como jugadoras o como árbitras?
R.- Me parece el ejemplo típico del jugador que pierde un partido y, como está enfadado, lo paga con el primero que pilla, en este caso, una juez de línea.
Pues esto es todo. Gracias, Alfonso.
Y ahora espero que la gente vea a los árbitros con otros ojos; porque no me negarán que Burrull es encantador, ¿no?.