Casi un siglo y medio lleva ya el colegio San José educando, tanto moral como intelectualmente, a miles de alumnos de toda la región. Todavía hoy, si nos damos una vuelta por el centro de Santander, nos encontramos este emblemático edificio en el número uno de la calle Asilo.
En 144 años de historia ha dado tiempo a que pasen por sus aulas un gran número de alumnos, y también ha tenido la oportunidad de evolucionar a mejor. Y eso deja huella. De las dos aulas de Educación Primaria, que había en el año 1904, hemos pasado a tener treinta y dos aulas repartidas entre Educación Infantil, Primaria, Secundaria y Bachiller.
Pero el centro no sólo ha evolucionado en instalaciones sino también en el terreno profesional, con profesores que poseen una mejor formación y que a diario se transmite a los alumnos, por medio de clases amenas y divertidas.
Sin embargo, mucho antes de todo esto, al colegio le han ocurrido un montón de cosas que han hecho que el centro no sea, casi, ni la sombra de lo que era.
Cuando fue fundado, en el año 1859, era una escuela dominical para jóvenes en la que se impartía enseñanza moral que, poco después, se convertiría en escuela de párvulos. A principios del siglo XX, las jóvenes acudían para aprender a hacer bordados y ajuares, y entre 1930 y 1941 hubo dos clases de Bachiller. En este último año, fue reconocido como centro de enseñanza primaria, pero no sería reconocido como centro de bachillerato superior hasta el año 1956. Cuatro años después, en 1960, fue reconocido como bachillerato laboral.
Actualmente, Bachiller y primer y segundo ciclo de Educación Infantil no son concertados, aunque este último ciclo lo será el curso que viene. En cambio, sí lo son Educación Primaria y Secundaria.
Hoy, el colegio es mixto desde el año 1996, pero no siempre fue así. En Educación Infantil, el colegio siempre ha sido mixto, pero en Primaria y Secundaria comenzó a ser mixto a partir de la promulgación de la ley de los conciertos.
Los alumnos en la actualidad
Los alumnos también han cambiado a lo largo de los años. En la actualidad, estudian en este centro unos 900 alumnos.
A continuación, adjuntamos una gráfica en la que podemos ver la división de los alumnos por cursos, sexo y nacionalidad, de la que podemos sacar la conclusión de que cada día, en nuestro colegio, conviven y se entremezclan casi todo tipo de razas, entre las que existe una perfecta armonía.
Servicios especiales
Durante toda su historia, el colegio ha incorporado nuevos servicios para la mayor comodidad de los alumnos y sus familiares: comedor, guardería, aula de informática, actividades extraescolares… y esto se ha dejado notar en el terreno educativo.
Algunos de estos servicios tienen una gran demanda. El comedor, por ejemplo, da de comer cada día a más de setenta alumnos, y la guardería, a la que a diario acuden un alto número de niños y de no tan niños.
La APA
El centro también cuenta con una asociación de padres, la cual está formada por todas aquellas personas que, teniendo un familiar estudiando en el colegio, paga la cuota que corresponda.
Sus objetivos son la colaboración con la Dirección del centro y con el profesorado, para lograr una mejor formación de acuerdo con el ideario del colegio.
Algunos de sus servicios son los de colaborar en las actividades educativas, organizarlas, asistir a padres o tutores en lo que concierne a la educación de los asociados, proponer la participación de los padres en la gestión del centro y facilitar la representación en los Consejos Escolares y en los órganos Colegiados.
Nuestro colegio también cuenta con un grupo religioso, al que pertenecen un considerable número de niños, llamado J.M.V. que se encarga de fomentar el cristianismo entre la juventud.
Los alumnos que pertenecen a este grupo se encargan de celebrar un par de convivencias al año, tanto a nivel regional, como nacional.