En el CEIP El Castañal de Selaya todos los cumpleaños se celebran, los de los escolares y los de los profes. Los padres y madres se esmeran y hacen unas tartas riquísimas. El otro día en el aula de 2 años fue el de Andrea y se celebró de forma diferente. ¿Queréis saber cómo?

Vivimos en la tierra de los sobaos y los padres y los abuelos de Andrea regentan un obrador, donde elaboran riquísimos sobaos, quesadas, bizcochos… así que se ofrecieron para celebrar el cumpleaños de forma distinta.

Lo primero, por supuesto, la corona… ¡La tutora ya la tenía preparada!

El padre de Andrea empieza a preparar la masa echando los huevos en el recipiente.

Los padres de Andrea trajeron todos lo necesario para elaborar los riquísimos sobaos: bandejas, huevos, harina, mantequilla… se colocaron el delantal, se lavaron las manos y, nunca mejor dicho,… ¡manos a la masa!

Los niños lo primero que hicieron también fue lavarse muy bien las manos. Todos batieron huevos y amasaron. Luego con una manga lo fueron echando a los ‘gorros’ (así se llama el papel donde se echa la masa) para, a continuación, meterlo en el pequeño horno que tienen en el office de la clase.

Todos a una, removiendo bien la masa para que no queden grumos.

Esperaron hasta que ya no se podía aguantar más el olor tan rico, abrieron con mucho cuidado para no quemarse la tapa del horno y comprobaron que ya estaban en su punto y se podían comer.

Los primeros en probarlos fueron los niños, la tutora y la técnico, pero hubo sobaos para todos los maestros y maestras  del cole. Estaban riquísimos, fue una experiencia genial y disfrutaron mucho todos y todas.

¿Pueden tener mejor pinta estos sobaos?

¡Ah! y por supuesto se le cantó ‘Cumpleaños Feliz’

Os dejamos una muestra de lo bien que lo pasaron en el siguiente enlace: