Alumnos del Santa Cruz descubren cómo funcionan el abastecimiento de aguas a Santander y la depuradora de San Román, además de comprobar, a pie de barro, cómo es el Pozón de la Dolores.
El miércoles 21 de febrero hicimos la primera excursión oficial de todo lo que llevamos de curso. Salimos de Villabáñez a eso de las 9 de la mañana, antes estuvimos todos juntos charlando sobre la salida y, mientras, Isidro nos sacaba unas fotos con las caras de felicidad.
Ya todos en la furgoneta emprendimos el viaje hacia El Pozón de la Dolores, ya allí encontramos a papá Ángel, seguidamente nos desplazamos hacia el abastecimiento de aguas de Santander y despues nos dirigimos a San Román de la Llanilla a ver la depuradora de aguas.
Una vez allí todos fuimos andando hasta el Pozón, donde había una gran variedad de animales y de instrumentos de pesca. Allí estuvimos unos diez minutos aproximadamente, como el camino estaba embarrado, no pudimos andar más por miedo a mancharnos. Nos retiramos a pie hacia la estación de abastecimiento de agua de Santander (donde vive papá).
Llegado allí, el segurita nos condujo a una sala, para que un señor un poco déspota nos explicase cómo abastecían el agua a todo Santander.
Una vez acabó de explicárnoslo y ya tuvimos sus más y sus menos con él por ser un poco chulillo. Seguido vimos todo el procedimiento que llevaba el agua hasta poder ser potable y ser servida a Santander.
Nos explicaron las obras que iban a hacer para agrandar el sistema de limpieza de todo Santander y así poder limpiar la Bahía. Esta vez nos tocó un señor muy majo. Nos explicó el procedimiento de limpieza sólido, liquido y químico que llevaba el agua hasta su limpieza y así poder tirarlo al mar con solo un 30% de suciedad en el agua.
Ah!, Por cierto, que se me olvidaba, había un empleado muy simpático con el que entablamos gran amistad, llamado Javi, que nos impactó por su sonrisa tan maravillosa.