Elena es una alumna del colegio Cisneros de Santander que toca el contrabajo en una orquesta; mientras escuchas su interpretación, puedes leer lo que nos cuenta de este instrumento.
El contrabajo es un instrumento de cuerda, se puede tocar tanto frotada como punzada. Es uno de los instrumentos de la familia de cuerda más grandes.
Para mi no es «cacharrón» ni un «trasto» como lo describen, para mi es cómo un gran amigo con alma y voz propia.
Pero tocar un instrumento no es tan fácil como parece, ya que esto supone ceder parte de tu tiempo libre para estudiar y ensayar.
Un contrabajo tiene igual de posibilidades que un violín o violoncelo, ya que con este instrumento se puede tocar tanto música clásica como jazz.
También se puede tocar en un conjunto como en una orquesta, un cuarteto, etc, o bien como solista.
En una orquesta es mayor el número de conciertos que se hacen en un año.
Si se toca bien y ensayas duro, puedes llegar a hacer conciertos en el extranjero.
Uno de estos días es posible que vayamos a Alemania y Viena a tocar en concursos internacionales con un coro, de Bilbao o de la academia.
En estos años que he estado en la orquesta hemos hecho al rededor de cinco conciertos en distintas ciudades como: Noja, Santander…
La obra de orquesta que más me gusta es el Danubio Azul, también una de las más largas. Otras obras que también tocamos son: El Himno de la Alegría, El Cancan, El Carmen, El Ave Verum…