Cómo sufrí al perderte aquella noche,
mi corazón se partió en dos,
no pude despedirme,
ni pude perseguirte,
te fuiste sin decir siquiera adiós.
Nos separan caminos diferentes,
lo que ocurrió por siempre nos alejó,
no volveré a tenerte,
ni volveré a perderte,
con el tuyo se paró mi corazón.
El destino jugó con nuestras vidas,
si se lo propuso, lo consiguió,
el quiso separarnos,
y así lo ideó,
sin mentiras, ni trampas,
sin engaños, ni desamores,
sólo le hizo falta un chico ahogado en sus penas,
que se refugió en el alcohol,
y regresando a su casa,
contra tu coche se estrelló,
quitándote a ti la vida,
robándome a mi el amor.
Rompiendo todos nuestros sueños,
causándome un gran dolor.
¿Podré volver a verte algún día?
Desde hace meses no me pregunto otra cosa,
quizás, si sea verdad que existe el paraíso,
ahora es lo que me gustaría creer,
pensar que volveré a verte,
y a tocar tu suave piel
aunque tendré que resignarme,
y seguir soñando que te encontraré,
en esa vida que hay después.

Trabajo original