El llamado problema palestino no es nada nuevo, pero a pesar de ello no todo el mundo conoce realmente las causas del mismo o el porqué resulta de tan difícil solución. Voy a intentar explicar un poco el proceso.

LOS ORÍGENES

Los judíos que viven en Jerusalén afirman que la Ciudad Vieja es una ciudad judía de tradición milenaria. Allí se ubican el Monte Moriah o Monte del Templo, donde iba a ser sacrificado Isaac, el Muro de las Lamentaciones, que según la tradición corresponde a uno de los muros del templo de Salomón, y el barrio judío en el que se hallan numerosas placas conmemorativas que recuerdan la defensa frente al asedio de los ejércitos árabes de 1948.

Además, entre el Monte Moriah y el Monte de los Olivos, en la zona más oriental, y fuera del recinto de la Ciudad Vieja, se encuentran el cementerio judío y los restos arqueológicos de la Jerusalén del rey David.

El año 638 es para los actuales árabes palestinos el punto de partida de la imperecedera tradición islámica de Jerusalén: es el momento en el que la ciudad es conquistada por el Islam. Durante el siglo VII, el califa Omeya Abd el-Malik Ibu el-Marwan mando construir en el Monte el Templo el Domo de la Roca, frente al cual se edificó, en el siglo VIII, la mezquita de Aksa. Ambas edificaciones alcanzaron la categoría de sagradas para el Islam puesto que fueron construidas en el lugar donde, según la tradición musulmana, Mahoma ascendió a los cielos en su viaje nocturno. Y Jerusalén es para ellos la tercera ciudad santa del Islam, después de La Meca y Medina.

Sólo en los periodos 1099-1187 y 1229-1244, Jerusalén permaneció en manos cristianas. Incluso después de la independencia de Israel en 1948 y hasta 1967, los Santos Lugares y el conjunto de la Ciudad Vieja de Jerusalén se mantuvieron bajo control de la mayoría Hachemita de Jordania.

LOS TERRITORIOS

Hasta el fin de la Primera Guerra Mundial en 1918, las tierras en conflicto permanecían al Imperio Otomano (Turco). Después grandes extensiones del Imperio Otomano se convirtieron en mandatos de la Sociedad de Naciones administrados por Gran Bretaña y Francia, durante el período de la preparación para la independencia. Francia recibió a la Gran Siria y Gran Bretaña administraba Irak, Transjordania y Palestina.

Desde finales del siglo XIX Palestina fue reclamada por los sionistas, un grupo de judíos encabezados por Theodor Herzl (1860-1904), que exigían el restablecimiento de una patria judía en base de los derechos biblicos. En noviembre de 1917 el Ministro de Asuntos Exteriores británico, Artur Balfour, comprometió a su gobierno a «considerar favorablemente» el establecimiento de una patria judía una vez derrotados los turcos.

En los años veinte y treinta los británicos interpretaron la Declaracion Balfour como el permiso de una limitada inmigración judía a Palestina. Pero los árabes la consideraron como un primer paso hacia la ocupación judía de su país y los sionistas como el primer paso hacia la creación de un estado judío independiente.

Gran Bretaña tuvo que enfrentarse a disturbios árabes y judíos cada vez mayores. En las postrimerías de la Segunda Guerra Mundial la violencia aumentó sobre todo entre grupos extremistas, por lo cual Gran Bretaña entregó el territorio en 1947 a las Naciones Unidas (ONU). Palestina fue repartida entre árabes y judios, posibilitando el nacimiento de Israel en 1948. La respuesta de los países árabes vecinos, que acababan de alcanzar la independencia de la soberanía occidental y estaban impregnados de un nuevo sentimiento nacionalista, fue inmediata.

Cinco ejércitos, de Egipto, Jordania, Irak, Siria y Libano, invadieron al nuevo estado y fueron derrotados por un único ejercito israelí recién formado. A comienzos de 1949, Israel ya había reafirmado su existencia, pero para asegurar su supervivencia con un mínimo de recursos desarrolló unas fuerzas armadas de gran capacidad.

LAS GUERRAS ÁRABE-ISRAELÍES

Hasta tres guerras enfrentaron posteriormente a los Estados árabes e Israel. En 1956 el líder egipcio Gamal A. Nasser nacionalizó el canal de Suez y provocó la intervención militar de Francia y Gran Bretaña en la zona que fue aprovechada por el Ejercito israelí para atacar también a Egipto. Pero la presión de las grandes potencias internacionales obligó a Israel a retirar sus tropas del Sinaí, a la vez que sé reconoció el dominio egipcio en el canal de Suez.

En 1967, la Guerra de los Seis Días supuso la ocupación israelí de Gaza y la península del Sinaí, los Altos del Golán y la Cisjordania, incluida la parte oriental de Jerusalén, hasta entonces respectivamente bajo fronteras de Egipto, Siria y Jordania.

En 1973 se produjo la Guerra del Yom Kippur, en la que los Estados árabes intentaron recuperar infructuosamente los territorios perdidos en 1967.

POLÍTICA Y TERRORISMO PALESTINO

La incapacidad de los ejércitos árabes para derrotar a Israel acentuó la desaparición de los palestinos exiliados. Articulados políticamente desde 1964 en la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), su líder indiscutible hasta hoy ha sido Yasser Arafat. Además de la vía politica, en los años 60 y 70 la causa palestina se dio a conocer con actos terroristas, obras de diversos grupos, como Septiembre Negro u organizaciones politico-militares como el Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP).

De hecho, los fundadores de las organizaciones palestinas se designaron a sí mismas como fedayines, que significa renacimiento en la muerte. Consideraban que su sacrificio, político y militar, liberaba a toda la comunidad.

PARIAS EN EL MUNDO ÁRABE

La mayor parte de estas acciones terroristas se organizaron desde Jordania, que desde 1948 acogía el colectivo más importantes de refugiados palestinos. Israel no dudó en enviar soldados al interior de este país para capturar o eliminar terroristas, surgiendo así numerosos problemas fronterizos.

El rey Hussein consideró a los palestinos un factor de desestabilización política y los expulsó en septiembre del 1970 (de ahí el nombre de Septiembre negro). La mayoría de palestinos recaló en Líbano y su presencia desató tensiones en la región que estallaron en 1974 con una Guerra Civil.

Los israelíes apoyaron a los sectores libaneses antipalestinos (cristianos y falangistas) e invadieron el Sur del país en 1982 para eliminar las organizaciones palestinas. En agosto de este año unos 15000 combatientes palestinos fueron obligados a partir hacia Argelia, Yemen y Túnez.

EL CONFLICTO ACTUAL

1- LA PRIMERA INTIFADA

Se inicia por los palestinos residentes en los territorios ocupados por Israel en 1967: Gaza y Cisjordania. Las malas condiciones de vida y de trabajo y la inexistencia de una solución al problema nacional palestino condujo en 1987 a una rebelión de las piedras, la Intifada, que empeoró la situación y alimentó a los sectores palestinos islamistas radicales organizados en Hamás.

En el fin de la Guerra Fría, la derrota de Irak en la Guerra del Golfo en 1991 y el hundimiento de la URSS dejaron la sensación en el mundo islámico de que EEUU, aliado tradicional de Israel, sería el director de los destinos del Próximo Oriente y algunos sectores árabes influyentes empezaron a meditar sobre la necesidad de hallar una solución pacífica al conflicto.

  • Los acuerdos de Oslo (Madrid 1991 y Oslo 1993).
    La llegada de los laboralistas israelíes al poder en 1992 supuso un vuelco radical de la situación. El Gobierno de Isaac Rabín frenó los asentamientos israelíes en territorios ocupados, reconoció a la OLP (y a su líder Yasser Arafat) y ofreció el establecimiento de una autonomía palestina. Por otro lado, propuso a Siria una retirada de los Altos de Golán. Si bien las negociaciones de Israel con Siria no fructificaron, sí lo hicieron las efectuadas con los palestinos en los Acuerdos de Oslo, que ratificaba la concesión de autonomía en Gaza y Jericó. Finalmente, en 1994, Israel acordó la paz con Jordania. Resultado de estos acuerdos fueron la ayuda económica de Estados Unidos a Israel y de la Unión Europea a los palestinos.
  • El asesinato de Rabín.
    No todos los sectores de las sociedades israelíes y palestinas se conformaron con los acuerdos de Oslo. El asesinato de Rabín en noviembre de 1995 fue la respuesta a estos de los ultranacionalistas y ultraortodoxos judíos, contrarios a devolver las regiones bíblicas de Judea y Samaria (Cisjordania). En el campo palestino, los integristas islámicos de Hamás tampoco reconocieron los acuerdos y mantuvieron sus actividades terroristas en suelo israelí.

2- LA SEGUNDA INTIFADA

Se produjo por la mala interpretación de la visita de Ariel Sharón a la Explanada de las Mezquitas de Jerusalén en septiembre de 2000, ya que lo vieron como una provocación paralizando así el proceso de paz. Desde entonces se han sucedido actuaciones terroristas de fundamentalistas palestinos, contestadas por el Ejército israelí hasta desembocar en un enfrentamiento abierto.

Los territorios en disputa son los siguientes:

  • Gaza.
    Territorio fronterizo entre Israel y Egipto. Aunque contiene algunos asentamientos judíos, parece existir cierta unanimidad entre palestinos e israelíes sobre la soberanía completa que la Autoridad Nacional Palestina (ANP) habrá de ejercer en la franja de Gaza.
  • Cisjordania.
    Territorio conquistado a Jordania en 1967 en el que las fricciones entre intereses palestinos y hebreos son más enconadas, pues son muy numerosos los asentamientos judíos. Los palestinos reclaman su desmantelamiento y una soberanía total en la zona de Israel, que se opone al abandono completo de la misma.
  • Altos del Golán.
    Territorio conquistado a Siria en 1967, su importancia para Israel no es militar, sino económica: allí se encuentra el nacimiento del río Jordán, que baña los campos del valle de Jordán en territorio israelí.
  • Sur del Líbano.
    Israel lo ocupó en 1982, en plena guerra civil libanesa, para limitar las acciones fundamentalistas Yihad Islámica y Hezbollah, apoyadas por Irán y toleradas por Siria. Pero la impopularidad de la campaña libanesa condujo, entre 2000 y el 2001, a su abandono total.
Trabajo original