Videojuegos, cine, televisión, juegos de Rol….todos están en «el ojo del huracán» por ser posibles causas de inducción a la violencia. Pero, ¿por qué?, ¿en qué se basan estas afirmaciones?, ¿cuál es el motivo para considerar a unos más inductores que a otros? En este reportaje se han buscado opiniones, se ha investigado sobre todos ellos y se ha llegado a unas conclusiones.
Introducción
Hace unos meses la polémica sobre los videojuegos volvió a aparecer cuando un menor asesino a su familia premeditadamente. La prensa fue dando palos de ciego acusando a las actividades con las que se le relacionó: juegos de rol, satanismo, artes marciales, y, finalmente, con los videojuegos, uno de los temas que vamos a tratar junto a la violencia en la televisión.
Opinión
Ahora veremos la opinión de una española normal sobre este asunto:
P.- Deme su opinión sobre el tema.
R.-Pienso que se está utilizando tanto este tema de la violencia que se está consiguiendo que un niño lo vea como un hecho natural y cotidiano que ya no choca a nadie; es más, está inculcándoles que de hecho tienen que utilizarla igual que lo hacen sus héroes de ficción, haciendo que no lleguen a discriminar lo que es bueno de lo que es malo, en este caso ser violento. Si oyen en la televisión que se ha producido un asesinato y lo ven totalmente normal; pueden llegar a verlo como un recurso más que les pueda solventar un momento de adversidad, sin pensar en alternativas diplomáticas de otra índole. De por sí el hombre es agresivo y violento, pero el vivir en sociedad le lleva a dominar este instinto para conseguir la convivencia entre seres civilizados, el tener tan presente la violencia, incluso en los videojuegos que los niños utilizan en sus ratos de ocio y relajación, fomenta que este instinto se desarrolle y se utilice a la mínima presión social.
P.- ¿Le preocuparía que su hijo rebobinara una película para volver a ver las escenas más sangrientas de una película?
R.- Me preocuparía mucho ver cómo mi hijo se recrea ante cualquier manifestación violenta, sea cual fuere.
P.- ¿Prefiere la violencia pasiva de la televisión o la interactiva de los videojuegos?
R.- Ninguna de las dos violencias me parece adecuada, y menos en niños cuyas personalidades aun no están definidas y son fácilmente manipulables.
P.- Si la televisión impone modas, ¿puede imponer la violencia?
R.- La TV impone modas y todo lo que se propone al ser el mayor medio de difusión al alcance de todo el mundo y prueba de ello es que las grandes empresas utilizan la televisión para su beneficio propio. Si la televisión, de forma constante, presenta películas, dibujos, juegos… Cuyos personajes son violentos, el niño llegara a pensar que si eso es normal en la vida real también lo es, ya que aun su ética no le diferencia lo bueno de lo malo.
El aprendizaje más significativo es aquel que realizamos mediante aquellos actos que realizan nuestros seres admirados.
P.- ¿Está junto a su hijo mientras juega a los videojuegos o ve la TV?
R.- No siempre puedes estar junto a tu hijo porque los pequeños también tienen vida propia. Aun así procuro vigilar sus ratos de ocio para que no le perjudique lo que esta haciendo. Al igual que no le dejo subirse al tejado para que no se caiga, procuro que cambie de canal si están emitiendo una película no apta.
P.- ¿Cree que los creadores de los videojuegos piensan en la manera que estos pueden afectar a las personas?
R.- Los creadores de los videojuegos solo piensan en lo que más beneficios va a aportar a su empresa.
No soy partidaria de tanta violencia, ni en los juegos…
ni en la vida real.
Podemos decir que por lo menos una persona sabe explicar su postura ante este tema con algo más que con un «Por que sí», algo que dudábamos al empezar.
Preocupación temática
Los tiempos han cambiado. Ahora el equipo ha sido sustituido por programas donde las balas sí impactan en las personas y juegos más violentos han relegado a los hermanos Mario al olvido.
Pero es mejor pararse a pensar que prefiere la gente, ¿Policías o un documental de TVE?
Incluso los más pequeños prefieren ver la guerra interminable entre Tom y Jerry antes que a los Teletubbies.
Muchísimos critican la gran violencia de los videojuegos mientras lo más normal es que las películas muestren un grado de violencia mucho más perjudicial, un ejemplo es este gráfico donde figuran los datos de una película relativamente blanda de acción.
- Goldeneye 007
Número de muertes: Aproximadamente 65
Número de explosiones: Unas 25
Número de disparos: 2000 aproximadamente
Número de robos: 3
Traiciones a escala nacional: 3
Secuestros: 2
Ahora cabe preguntarse, ¿por qué son los videojuegos los más perjudicados por este tema cuando las películas son mucho más perjudiciales? La respuesta es sencilla siempre hay alguien atacando a alguien o algo, en este caso los videojuegos son un blanco fácil porque sus usuarios potenciales son gente de entre 13 y 25 años, así que los censores se ceban con un genero que puede ser atacado con total impunidad porque sus usuarios no pueden defenderse.
Otra respuesta seria el control, esa cualidad casi divina que significa poder escoger las decisiones que creas apropiadas, mejor explicarlo más ampliamente, como ya hemos dicho, la mayoría de la gente y de los censores se escandalizan ante videojuegos y permanecen indiferentes ante muchas películas, muchos de esos censores se preocuparon en su día por la aparición del video y la función de rebobinado, creían que los usuarios se iban a convertir en sádicos sedientos de sangre. También podría ser el hecho de que al igual de que podemos tomar el control en un videojuego, también podemos elegir que escenas ver gracias al video. O sea, que lo que podrían querer no es defendernos de algo, si no anular nuestra capacidad de tomar decisiones por nosotros mismos, convertirnos en hormigas que se preocupan del todo en vez de en el individuo, eso ya existió y falló, se llamaba comunismo.
Pero tampoco hay que poner contra la pared al cine, ya que las películas que no tienen ni una sola pelea no venden. Incluso en la publicidad se usa la violencia en algunas ocasiones, pero la violencia no es el pilar de nada, es solo un factor ambiental como el argumento o la música, tanto en el cine como en los videojuegos. Por ultimo nos gustaría comentar un hecho que ahora mismo pasa en Alemania, como temen el resurgimiento de los grupos nazis sancionan toda clase de exaltación de la violencia, el hecho de que se meta en el mismo saco a algunos videojuegos y películas que a la propaganda ultraderechista lleva a pensar. No hay que olvidar que Alemania es uno de los motores de la Unión Europea.
Como ultimo comentario es que algunos psicólogos opinan lo que muchos ya sabemos desde hace tiempo, jugar a videojuegos violentos no es malo sino beneficioso, porque se descarga adrenalina ante una pantalla en vez de hacerlo con una persona.
Jugando a un videojuego
Como muchos de los que dicen «proteger» a la gente de la violencia sin sentido de los videojuegos lo más cerca que han estado de uno es al otro lado de un escaparate hemos decidido incluir este apartado donde contar nuestra experiencia tras jugar con un videojuego. El elegido es uno de los más violentos que hemos encontrado, un juego de realidad virtual del que solo se oyen rumores escalofriantes, en este juego el jugador encarna a un soldado en la II guerra mundial justo en el repliegue de las fuerzas alemanas hacia Berlín.
Esta es la experiencia de alguien que estuvo jugando a ese juego:
Empieza en una trinchera bajo fuego de mortero enemigo, inmediatamente llega por radio la hora de ganar terreno a los alemanes. Sale de la trinchera, es prácticamente la ultima oleada de los aliados, los alemanes son puros retales pero se defienden de una manera asombrosa, tras eliminar a unos alemanes corre entre los cuerpos de combatientes caídos hacia una posición alemana junto a otros compañeros pero es alcanzado por una bala en la pierna, en la vida real sufre un calambre en la extremidad, en el juego se queda en el suelo sangrando mientras ve a un compañero sufriendo por las bayonetas de los alemanes, finalmente, los aliados le rescatan para otra batalla.
Ahora esta entrando con las primeras fuerzas a Berlín, entre las ruinas de esa ciudad devastada por los bombardeos todavía quedan fuerzas nazis que patrullan por la ciudad y francotiradores en los pocos edificios que continúan en pie. Todo esto causa numerosas bajas en ambos bandos pero el protagonista es uno de los supervivientes. Entre todo destaca que cuando uno de los aliados fue herido escucho decir «¡Oh, my brother!» y uno de los soldados salió como loco del parapeto con su fusil disparando a los alemanes, pero pronto cayo bajo fuego enemigo. Tras apresar a Rommel dan la noticia de que Hitler ha escapado escoltado por una guarnición de tanques, pero que los carros de combate aliados los exterminaron a todos.
Pasa a otro nivel, un general alemán ha huido con numerosos carros de combate y varios aviones, empieza todo en medio de un tiroteo, corre en busca de un parapeto, pero es alcanzado por artillería pesada y muere. En la vida real el jugador sufre un gran calambre que le recorre todo el pecho.
A modo de conclusión
Como conclusión parece apropiado hablar sobre un tema que nadie controla a la perfección, los asesinatos de menores y su relación con el tema que nos ocupa.
El asesino de Murcia declaró asesinar a su familia para estar solo, pero nadie dudó que el culpable eran los videojuegos por su parecido con el protagonista de uno de ellos. Este videojuego no incluye violencia de un modo cruel o despiadado, además el motivo de ella es salvar el mundo de una bruja y en ocasiones la autodefensa.
Luego ocurrió lo de las chicas que asesinaron a su amiga, cuando se demostró que la guija, los videojuegos o los juegos de rol no tenían nada que ver con el crimen se quedaron sin argumentos.
En el primero de los casos todos acabaron coincidiendo en que el videojuego solo fue el detonante, que el menor tenia una inestabilidad mental grave.
Si se deben prohibir los videojuegos por ser la gota que vertió el vaso también deberíamos prohibir la Biblia ya que algunos psicópatas dicen matar en nombre de Dios.
Por ultimo, unos pensamientos sobre este tema:
porque induce a la violencia sobre todo en los espectadores poco formados»
Fernando Bringas
«Debe haber de todo ya que para gustos se hicieron los colores»
Juan Hernández