192 personas murieron y otras 1.400 resultaron heridas el 11 de marzo de 2004 en el mayor ataque terrorista en la historia de España. La investigación de lo ocurrido corre a cargo del juez Juan del Olmo, de la Audiencia Nacional, al tiempo que el Congreso ha creado una comisión para arrojar luz sobre los posibles errores políticos o policiales. España en pleno ha recordado en silencio el primer año de la matanza.
España entera guardó cinco minutos de silencio en memoria de las víctimas del 11-M en el primer aniversario del atentado. Los Reyes inauguraron a las 12 del mediodía el llamado ‘Bosque de los Ausentes’ en Madrid y por la tarde asistieron a un funeral en La Almudena.
Un promontorio de olivos y cipreses, en recuerdo de los 192 fallecidos en los trenes y el Geo de Leganés, se instaló en el parque del Retiro, donde también estuvieron los príncipes de Asturias, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y autoridades extranjeras. Tras los minutos de silencio, una ofrenda floral y la interpretación por una violonchelista de la pieza El canto de los pájaros, de Pau Casals, fueron todo en una sobria y breve ceremonia.
Madrid, 11 de marzo de 2004. Una bomba explota en un tren de cercanías en la estación de Atocha a las 7.37 horas. Apenas un minuto después se producen otras dos explosiones en el mismo tren. El caos y el desconcierto invaden los andenes y escaleras mecánicas de la terminal. Son las 7.38 cuando explotan otras dos bombas en un convoy en la estación de El Pozo y otra en Santa Eugenia. A las 7.39, cuatro explosiones más destrozan otro tren a 500 metros de Atocha. En apenas tres minutos, 10 bombas reescriben la Historia: Madrid acaba de sufrir el mayor atentado terrorista perpetrado jamás en España. 192 muertos y más de 1.500 heridos hacen imposible olvidarlo.
Faltaban sólo tres días de las elecciones generales, y todos los partidos cancelaron sus agendas y dieron por finalizada la campaña. Por primera vez desde el 23-F, el Rey se dirigió a la nación para mostrar su solidaridad con las víctimas y pedir «unidad, firmeza y serenidad» en la lucha contra el terrorismo.
Tras la masacre, casi todos apuntaron a ETA como autora de la matanza, pero después se demostró que era responsabilidad del terrorismo islamista, de la organización Al Qaeda dirigida por Bin Laden.
Manifestaciones multitudinarias contra el terrorismo se sucedieron por todos los rincones del país, un país que se volcó con las víctimas.
Un año después de la matanza, España ha revivido su peor atentado terrorista. Sigue en marcha la investigación y la Comisión presenta sus primeras conclusiones que parecen desunir a los partidos políticos. Los actos conmemorativos se agolpan y, mientras, la calle sigue llorando a sus víctimas.