Representante básico de la ayuda humanitaria internacional, te descubrimos la Cruz Roja por dentro: quién forma parte de ella, cuál es su ideología, su forma de actuación y sus objetivos primordiales.
El sentido de ayuda humanitaria aparece en la historia de la humanidad desde, casi, sus principios. Las sociedades siempre han respetado a todos aquellos que, de modo altruista, ayudaban a las personas más débiles. Sin embargo, este concepto ha ido evolucionando hasta concebirse como una responsabilidad individual y no sólo como una tarea que debían llevar a cabo las organizaciones religiosas.
En este marco nace la Cruz Roja, una institución de carácter humanitario, voluntario y de interés público. Su ideología se basa en siete principios fundamentales, entre los cuales se encuentran la unidad, imparcialidad, neutralidad o la independencia, que deben ser entendidos y puestos en práctica por todos sus integrantes.
La organización fue fundada por un empresario suizo llamado Henry Dunant, quien durante un viaje al norte de Italia, pudo contemplar las atrocidades que se estaban produciendo durante la Batalla de Solferino (1859), los miles de cadáveres que había dejado atrás el sangriento enfrentamiento italo-austríaco y como una gran cuantía de hombres morían por ser desatendidos sanitariamente. Esto le causó tal impresión, que planteó la idea de lo que más tarde llegarían a ser las sociedades de la Cruz Roja. Algo que señaló fundamental desde el principio fue la neutralidad de la organización, es decir, que la raza, cultura o religión no impidiesen el proporcionar ayuda a alguien que la necesitase.
La Cruz Roja se representa mediante una cruz de color rojo sobre un emblema de fondo blanco, aunque se sustituye la cruz por una media luna en los países árabes, donde la organización recibe el nombre de La Media Luna Roja, debido a que la cruz es un símbolo cristiano. También hay otros símbolos que representan otras sociedades o agrupaciones que actúan bajo el marco de la Cruz Roja, como la Federación Internacional (FICR) o el Comité Internacional.
Toda persona que porta el emblema es reconocida por otros como representante de la ayuda imparcial a los heridos en tiempos de guerra, y está protegida por los Convenios de Ginebra. Además, en tiempos de paz, se sabe que pertenecen a la Sociedad Nacional.
Una parte esencial y sin la que no podría funcionar esta organización no es simplemente la ayuda económica que se recibe a través de socios o simples donantes, sino la actuación de los voluntarios.
Los voluntarios realizan todo tipo de actividades en beneficio de la sociedad porque ellos, desinteresada y solidariamente, piensan que su colaboración es necesaria para desarrollar los objetivos previstos o sus creencias así se lo dictan.
Sin embargo, también es necesaria la colaboración de personal remunerado, profesionales de distintas especialidades que completen el trabajo de los voluntarios, debido a que por su cualificación, son de gran ayuda en cuestiones de tipo específico que los voluntarios no son capaces de cubrir.
Actualmente, las áreas de intervención de la Cruz Roja se pueden clasificar básicamente en:
- Intervención social: ayuda a inmigrantes y refugiados, personas drogodependientes, enfermos de SIDA, reclusos, personas discapacitadas, ancianos…
- Intervención sanitaria: básicamente el transporte sanitario.
- Socorros y emergencias: salvamento marítimo, primera intervención en emergencias y servicios de tipo preventivo.
- Cooperación internacional: ayuda humanitaria, cooperación al desarrollo o institucional y educación para el desarrollo, la paz y los derechos humanos.
- Medio ambiente: protección y mejora del entorno, y campaña de sensibilización medio ambiental.
- Empleo: ayuda en la búsqueda de empleo, sobre todo a las personas que encuentran más dificultades a la hora de ser contratadas.
- Formación: sensibilizar y capacitar a los miembros de Cruz Roja.
- Voluntariado y participación: dar a conocer la organización, captación de nuevos voluntarios y desarrollar la participación en la organización para lograr una mayor implicación de todos aquellos que forman parte de ella.
Además de esto, hay varios proyectos en marcha, no sólo a nivel nacional sino internacional, como es el caso de los que están en funcionamiento en Bosnia, tras la guerra de Kosovo, o en Irak, después del conflicto que recientemente ha sacudido el país.