Los estudiantes del Taller de Prensa del Centro de Educación de Personas Adultas (CEPA) Caligrama de Torrelavega han demostrado a lo largo del curso sus inquietudes y sus ganas de continuar formándose. La poesía es una de sus aficiones y, por eso, Jesús y Trinidad han querido compartir sus creaciones.
‘Otoño’
Por Jesús Benito
Árboles que llorarán
los muchos recuerdos de aquel maravilloso verano.
Pensamientos con viento llegarán.
Los dos de la mano,
jugando en plazas y parques, también en el llano.
Me vino hoy tu imagen caminando,
con calles y galerías medio vacías.
Tu atardecer sentado descansando
te daba gracias,
mientras el sol te acaricia.
Tertulias que ya no volverán.
Sin despedirte de mí te fuiste,
y también las golondrinas emigrarán.
Para qué insiste,
yo te escribiré por donde esté.
¿Cuándo podré otra vez verte,
sentirte aquí y allí estarás,
y echarte de menos fuerte?
Me encontrarás,
y pienso y deseo que volverás.
‘Vida’
Jesús Benito
Triste estoy, no quiero llorar
Tengo ilusiones y aún sé soñar.
Yo un bailarín, quiero parar.
Sé que todo lo que me rodea quiero enseñar
No soy un rey ¿para qué reinar?
¡La guerra! No quiero herir.
Yo, bastante tolerante, tengo mucho que perdonar
¡La Muerte! No quiero morir.
Enamorados, todos juntos siempre caminamos.
Artistas siempre somos, hay que hacer reír.
Hacia la eterna gloria caminaremos,
algo nuevo que hallar y descubrir.
¿Para qué parar? Mejor seguir.
Vuestra sola soledad es nociva acompañar
¿Por qué correr si es perseguir?
Hay que dar, no recibir, también desempeñar.
‘Cuando voy a la escuela’
Trinidad Hoyuela
Cuando voy a la Escuela
no sabes lo que me cuesta
subir esa hermosa cuesta.
Entro y me siento en el banco
así hago un descanso
y diviso a los que suben
todos miran a las nubes.
Me dirijo al ascensor
este tiene un buen motor
con el peso que carga
las debe pasar amargas.
Por el pasillo camino
hasta llegar a la clase
con el ojo bien abierto
para ver lo que allí pase.
Cuando el profe empieza la clase
todo el mundo dice frases
que cosidas con buen hilo
puede salir al fino.
A la salida me bajo
hasta el cero sin trabajo
pues la puerta de emergencia
suele estar siempre abierta.
Así se acaba la historia
de esta pobre mujer
que ella va a la Escuela
porque quiere aprender.