Manuel Barquín, mi padre, tiene 40 años y trabaja en un comercio de decoración, Forjas Artísticas. Vamos a conocer un poco más sobre su trabajo. Os dejo con la entrevista, espero que os guste tanto como a mí me ha gustado hacerla.
Pregunta. – ¿Qué tipo de productos vendes en tu comercio?
Respuesta. – Tenemos muchísimos productos, todos ellos pertenecientes al menaje, descanso del hogar y decoración, tanto de interior como de exterior. Por nombrar algunos: muebles, cuadros, espejos, figuras y objetos de cerámica, colchones, lámparas, mesas y multitud de productos de piedra artificial como mesas, bancos, barbacoas, fuentes, jardineras y figuras.
P.- ¿Cuándo empezaste a trabajar en este comercio?
R.- Nada más acabar mis estudios de Administración y Dirección de Empresas en Santander, empecé a trabajar en nuestro comercio familiar. Esta empresa la fundaron mis abuelos Manolo y Consuelo en los años 60 y yo soy la 3ª generación, así que desde niño he estado vinculado a ella y siempre he ayudado cuando me han necesitado. En la actualidad somos mis padres y yo los que estamos al cargo de la empresa.
P.- Veo que es una empresa que lleva muchos años en el sector de la decoración. ¿Nos podrías decir cuáles son tus funciones en el comercio?
R.- Puesto que es una pequeña empresa familiar desempeño muchas funciones: atiendo a nuestros clientes y les asesoro sobre nuestros productos, realizo repartos a domicilio, elaboro pedidos, hago labores administrativas, de marketing, mantenimiento… Lo bueno de tener tantas funciones es que la mayor parte de las veces puedo elegir cuál de ellas hacer y así se hace más ameno.
P.- Ahora que sabemos algo más acerca de las funciones que desempeñas, y que vemos que son muchas, ¿podrías decirnos cuál es la que más te gusta hacer? Háblanos un poco sobre ella.
R.- Por lo general, el trato directo con el cliente me gusta mucho, ya sea en el comercio o en su propio domicilio cuando hago los repartos, ya que esta es la función que me parece más amena. Digo «por lo general», puesto que esto depende un poco del día y de cómo me encuentre. Me explico. A veces tengo un mal día o no me encuentro bien pero tengo que atender a mis clientes de forma amable y asesorarlos de la mejor manera posible.
Cuando viene un cliente al comercio con alguna necesidad, mi función es enseñarle los productos que son más adecuados y explicarle los pros y los contras de cada uno de ellos. Una vez que el cliente ha sido asesorado es él el que toma la decisión de su compra. Y, en caso de que decida comprarlo y el producto sea voluminoso o pesado, me encargo de llevárselo a su domicilio.
P.- Durante tantos años tendréis un montón de clientes. ¿De dónde son la mayor parte de tus clientes y desde dónde ha venido tu cliente más lejano?
R.- La mayor parte de nuestros clientes son de Cantabria y País Vasco. También tenemos muchos clientes que, bien porque vienen de vacaciones o porque tienen una segunda residencia en Cantabria, nos visitan desde Madrid y Castilla y León. Es difícil saber desde dónde nos han visitado todos nuestros clientes y más aún si vienen del extranjero. Tenemos clientes habituales que nos visitan casi todos los años durante sus vacaciones de verano que vienen desde México, Estados Unidos, Alemania, Francia o Inglaterra. Nuestro cliente más lejano nos ha visitado desde Australia, aunque realmente es vasco y viene a ver a su familia que reside en Bilbao.
P.- Nos cuentas que una de tus funciones es realizar el reparto a domicilio y que tienes clientes de distintas nacionalidades. ¿Cuál es el lugar más lejano al que has ido a hacer un reparto?
R.- El tipo de producto que nos suelen comprar los clientes extranjeros es pequeño, y son ellos mismos los que se lo llevan en sus propios vehículos o en el avión. Hemos realizado envíos por agencias de transporte a distintos lugares lejos de la península como Alemania, Francia, Holanda, las Islas Baleares o las Islas Canarias, pero en estos casos no he ido yo a realizar el reparto. Los lugares más lejanos a los que he ido a hacer un reparto con nuestro camión han sido Zaragoza, Logroño, Pamplona, Zarautz, Burgos, Palencia y Valladolid. Aunque la mayor parte de los repartos los realizamos en Cantabria y en la zona occidental del País Vasco.
P.- Antes de despedirnos, ¿nos podrías contar alguna anécdota que te haya sucedido durante todo este tiempo en el negocio?
R.- Durante estos años he tenido varias anécdotas, como pinchazos en los neumáticos del camión, problemas en los repartos, controles de la Guardia Civil o historias con nuestros clientes. Hay una clienta inglesa, Mary, que nos visita varias veces al año desde hace unos 20 años. Se compró un chalet en Argoños, un pueblo a cinco minutos de nuestro comercio, y la primera vez que nos visitó no hablaba casi nada de español. Ese día le atendí hablando en inglés y le dije que clientes como ella me venían bien para practicar mi inglés. Después de tanto tiempo en España ella habla español perfectamente y ya hemos hecho una buena amistad, pero siempre que viene a nuestra tienda me busca para que le atienda y siempre me habla en inglés. Un día le dije que por qué no hablaba en español, me recordó la frase que le había dicho: «You need customers like me to practice your English».
P.- Vaya, qué anécdota más graciosa, son como unas clases particulares de inglés gratis. Pues ya hemos acabado con la entrevista, muchas gracias por habernos atendido y esperemos que las ventas te vayan aumentando cada vez más.
R.- Muchas gracias. Ha sido un placer atenderte y explicarte un poco más sobre mi trabajo. Nos vemos pronto.