¿Quién es un refugiado? ¿Es lo mismo que un inmigrante? ¿Por qué tienen móviles? ¿Por qué dejan su tierra? ¿Cómo vamos a acoger a tanta gente? Con todas estas preguntas en la cabeza, el alumnado de 2º ESO tenía un estereotipo preconcebido sobre las personas refugiadas que había que desterrar.

Llevaban una pulsera, como la que deben llevar los refugiados para ser identificados.

Estudiantes de 2º de ESO del colegio Kostka vivieron del 2 al 4 de diciembre como auténticos refugiados una gran parte del tiempo. Sacos a la espalda, comida diferente, pocas comodidades, cargas como bebés simulados, pasos fronterizos con funcionarios sobornados y sobornables, actitudes machistas y xenófobas simuladas sobre sus personas… todo ello acompañado de una reflexión final sobre el hecho. La concienciación y la eliminación de etiquetas va siendo entonces una realidad, y las preguntas que tenían al salir se van respondiendo solas.

Vivieron como auténticos refugiados.

Todo esto forma parte de un proyecto viviencial para 2º de ESO que acerca la realidad de los migrantes y refugiados con el principal objetivo de romper estereotipos. Para realizarlo, el profesorado del curso se apoyó en la ONG Alboan, que con su proyecto ‘Más allá de las fronteras’ propone una visión transversal del hecho de la migración y asilo político, la guerra y el movimiento humano.