El colegio Kostka se ha sumado este curso al programa de Tutorización Entre Iguales (TEI), una iniciativa en la que participan cerca de una veintena de centros educativos y cuyo objetivo es mejorar la integración escolar y trabajar por una escuela inclusiva y no violenta. Excursiones por la senda fluvial del Nansa y el litoral de Santander han sido algunas de las últimas actividades realizadas.

Este curso es el primero en el que se ha implantado el programa de Tutorización Entre Iguales en el colegio, en la etapa de ESO. Esta iniciativa consiste en la participación activa de los iguales como elementos básicos del proceso de prevención e intervención en situaciones de violencia a acoso escolar: los estudiantes de 3º de Educación Secundaria son tutores emocionales de los de 1º, repartiéndose en parejas de distinto nivel.

Si al principio de curso, cuando se propuso implantar este programa, había cierto recelo y artificiosidad al hablar o tratarse, en este momento ya se puede decir que este problema no existe. La confianza como línea de fuerza del colegio y pieza clave en el programa que intenta prevenir el acoso escolar, parece imponerse entre ellos.

En el marco de este programa, los estudiantes realizaron una nueva actividad el 21 de febrero consistente en caminar la senda litoral de Santander, parando a realizar diversas pruebas o juegos de cooperación. En el parque de Mataleñas, pintura al aire libre. En el faro y los acantilados, fotografías. En el Panteón del inglés, relato conjunto. Finalmente, en la playa de la Maruca, una variante del juego del pañuelo, más cooperativa.

Fotografía realizada por Adolfo, estudiante del colegio, en la senda fluvial del Nansa.

Además, el 10 de enero se desarrolló en la senda fluvial del Nansa otra de las actividades TEI, esta vez con destino a la zona occidental de Cantabria. Previamente, los tutores habían trabajado con ellos en las clases de Lengua actividades relativas a la intervención humana, fauna y flora de la zona para que el alumnado fuese consciente de los elementos que iban a observar y de los que debían tomar muestras en algunos casos (energía hidráulica e hidroeléctrica, bosque de ribera, municipio, comarca…).

Por ello, pertrechados de ropa para caminar, dispositivos para fotografiar, un breve dossier con el que comprobar in situ lo que se había trabajado en clase, y junto a su pareja TEI, los alumnos realizaron la ruta entre Muñorrodero y Camijanes documentando fotográficamente la salida y presentando una foto por pareja.

En el colegio se juzgaron después las fotografías presentadas, otorgando premios a las tres de mayor calidad artística.

 

Una alumna ayuda a otra en la actividad ‘Guía de ciegos’.

Actividades de formación y sensibilización

De la mano del programa TEI se realizan durante el curso actividades de formación, de cohesión, de sensibilización. Por ejemplo, se comenzó con una actividad basada en la confianza llamada ‘Guía de ciegos’, en la que los participantes debían terminar un circuito con los ojos tapados y la ayuda de las instrucciones de la pareja.

A continuación se realizó ‘Poliedros’, actividad que intenta fomentar el trabajo coordinado y en la que los escolares construyeron formas imaginativas en pareja a partir del desarrollo de poliedros básicos.

Resultado de los trabajos realizados con poliedros.

Se consigue trabajar las capacidades básicas de nuestro ideario junto a otras típicamente competenciales, por ello continuaremos desarrollando el programa TEI de forma piloto este curso para extenderlo después a otras etapas educativas.

En la galería puedes ver algunas de las fotografías realizadas durante la salida a la senda fluvial del Nansa.