Un grupo de estudiantes del CC Miguel Bravo-AA La Salle recreó el Barrio Pesquero en Minecraft, superando limitaciones tecnológicas y colaborando en equipo. Participaron en la feria CantabRobots Junior 2024, donde expusieron su proyecto y lograron quedar en primer lugar. La experiencia combinó aprendizaje en diversas materias y creatividad en un entorno digital.
Nuestro proyecto comenzó el 26 de febrero, con la noticia de que teníamos que hacer un mundo de Minecraft, nosotros elegimos el Barrio Pesquero porque es el entorno que nos representa.
El primer día, para saber quién se quería apuntar, nos dieron una hoja para que nos apuntáramos. No todos podíamos participar, ya que iba de 5º de primaria a 2º de la ESO. Al final acabamos siendo 79 personas.
Equipo del colegio Miguel Bravo.
Ya con todos los estudiantes listos, nos dividimos en 16 grupos. Dos equipos trabajaríamos el lunes, otros dos el martes y otros dos el jueves. La razón de organizarnos así fue la escasez de recursos tecnológicos que tenemos en el centro (solo disponibles 12 ordenadores que puedan mover correctamente con Minecraft), siendo aproximadamente 6 personas en cada equipo. Los seis equipos que ya estaban divididos eran de la ESO, y los que faltan eran de Primaria, que ayudaban en el patio, ya que su recreo duraba más.
Empezamos el proyecto haciendo una plataforma gris, de ahí pusimos las carreteras del barrio, más tarde delimitamos los edificios y los dividimos entre los equipos para saber situarse.
Fuimos a la calle a hacer fotos del barrio, para ver bien cada detalle, con Google Maps y Earth buscamos las medidas exactas de cada edificio como, por ejemplo, las pistas, restaurantes etc… Pero hubo un problema, porque los bloques de Minecraft median un metro y cuando un edificio media un metro y medio no teníamos claro que hacer, así que nos pusimos de acuerdo para redondear hacia arriba.
Cada grupo estaba asignado a una parte del barrio. Por ejemplo, el grupo 2 tenía que hacer la zona de la cancha de baloncesto y así con todos los grupos. Primero hicimos las estructuras de los edificios, con ellos tuvimos problemas ya que probábamos muchos materiales y teníamos que borrarlo todo y volverlo a construir, una vez terminado las estructuras hicimos un poco de relleno por dentro, es decir, dejábamos un bloque de separación y poníamos una pared para que no se viera vacío, una vez terminado todas las estructuras importantes del barrio, decidimos seguir con los detalles y las decoraciones, como parques, embarcaderos etc…
Una vez terminado, seguimos con los NPC’S, que son unos personajes los cuales hemos modificado a nuestro gusto para dar instrucciones, o información del antiguo Barrio y del actual, del colegio, del tipo de pesca, de la flota marina…
Stand del colegio Miguel Bravo en CantabRobots Junior 2024.
A lo largo del proyecto nos encontramos con diversos pros y contras:
Nosotros supimos trabajar en equipo sin problemas, nos ayudábamos entre nosotros, y también repasamos un montón de asignaturas, como lengua al escribir, historia al buscar información del Barrio, matemáticas de salir a hacer fotos, medir algunos edificios con pasos, plástica, al crear los edificios y los murales.
La elección de materiales fue uno de nuestros problemas, a veces no nos poníamos de acuerdo en algunas cosas, éramos muchos y había poquitos ordenadores. Cuando intentábamos construir a veces teníamos errores, entonces tratábamos de arreglarlo, pero destruimos cada vez más.
Cuando terminamos todo nos dimos cuenta de que no quedaba bien el bioma que nos rodeaba, así que, para esconderlo, pusimos una pared de hielo rodeando el barrio pesquero, y para decorarla, decidimos poner unas nubes y edificios en 2d.
Ya habíamos terminado el barrio, solo quedaba esperar al día del concurso.
La feria CantabRobots Junior 2024 se celebró en el IES Valentín Turienzo en Colindres, a unos cuarenta kilómetros de Santander. Allí, lo primero que hicimos fue montar nuestro stand con referencias a nuestro barrio, como unas redes de pesca y un barco, pero también con referencias al proyecto como unos carteles que tenían información sobre el desarrollo de este, unas cabezas del juego y dos tablets para que los visitantes y los jurados probaran nuestro mundo. Al acabar de montar, unas pocas personas se quedaron a explicar nuestro proyecto y las demás personas pudieron visitar la variedad de trabajos expuestos
Asistimos 64 alumnos para el proyecto de Minecraft y nueve para el proyecto de Digicraft. La razón de ser tantos es que en nuestro centro los proyectos y la participación en este tipo de actividades las afrontamos como una oportunidad de aprendizaje para todo el que esté interesado.
Estudiantes explicando el proyecto.
La gran mayoría eran niños de tercer ciclo de Primaria, así que tuvimos que estar mostrándoles cómo era la feria, mientras cinco o seis personas estaban en la mesa explicando nuestro proyecto a gente de otros colegios.
Al final de la mañana, tocó exponer el mundo a todos los asistentes, así que subió al escenario una representación de los integrantes del proyecto. Aunque solo tuvimos cinco minutos para exponer el proyecto, nos dio tiempo de sobra. El colegio Velarde de Maliaño recreó quince cuadros famosos como ‘Noche Estrellada’ o ‘La maja desnuda’, incluyendo información necesaria para conocer el contexto del cuadro. El colegio Los Puentes hizo una réplica de las instituciones de Colindres.
Los ganadores fuimos el colegio Miguel Bravo, seguido del colegio Los Puentes y como tercer puesto el Pedro Velarde. Nos marchamos muy contentos y orgullosos, no solo por haber ganado, sino por ver que nuestro esfuerzo se había visto recompensado.
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