Los medios de transporte del SMTU (Servicio Municipal de Transportes Urbanos) de Santander poseen actualmente los servicios de transporte público más avanzados. Podremos ir viendo detalladamente a través de este amplio reportaje realizado por dos alumnas del IES anta Clara, la evolución de dichos transportes (autobús), en la capital cántabra.

En 1875 comienza el servicio público del «Ferrocarril de El Sardinero», conocido por la población por el nombre de Tranvía de Gandarillas, obteniendo el nombre de su promotor. Este fue considerado históricamente el primer transporte de pasajeros establecido en la ciudad de Santander.
El servicio se inició con mulas. En el trabajo de remolque del primer transporte urbano de Santander se utilizaban 32 mulas por la vía de un sólo carril para la ida y vuelta, a lo largo de más de 4 kilómetros, mientras que ahora, los autobuses recorren nuestra ciudad incontables veces, y de una forma mucho más cómoda y rápida.

La prensa hizo entonces grandes elogios de los tranvías movidos por los cuadrúpedos. El tranvía se puso de moda y la gente lo utilizaba especialmente para ir a la playa.
Dos años después, y con la llegada de las locomotoras, llamadas «Santander» y «Sardinero», quedó anulado completamente el remolque por medio de mulas.

TRANSPORTES URBANOS, LA ÉPOCA MODERNA

Al llegar los años 60, los transportes urbanos de la capital de Cantabria sufre una gran transformación.
Se trata del cambio en la marcha de las empresas de autobuses y de las relaciones laborales, sociales, o de trato con el público. En fin, era la llegada de una nueva época, y con ella, la necesidad de ampliar y mejorar los servicios. Por eso, se acuerda dar mejor servicio durante el verano, el servicio nocturno se amplía y se autoriza la salida de un autobús para el traslado de estudiantes hasta la Universidad, lo que supuso cuatro viajes diarios con un total de veinticuatro kilómetros de recorrido y una recaudación de 160 ptas. diarias. Mientras, se acuerda establecer nuevas tarifas y la posibilidad de establecer pases económicos
Se acuerda asimismo la provisión de plazas de cobradores, dos con carácter fijo y seis con carácter eventual, según las necesidades del servicio. Se ponen en marcha cinco nuevos autobuses.

Un hecho curioso: En 1960 nace un niño en un trolebús y la alcaldía gratificó a los padres con mil pesetas y el Consejo de Administración aprobó la concesión de un pase vitalicio al recién nacido.

En marzo de 1961 cambia el nombre del Servicio Urbano de Transportes que pasa a denominarse » Servicio Municipalizado de Transportes Urbanos » abandonando el antiguo nombre de » Empresa municipal de transportes urbanos.

En 1963 se acuerda elevar la edad de 35 a 45 años para ser admitidas las solicitudes para cubrir plazas de conductores.

En esta época Santander se encuentra en un periodo de expansión en todos los niveles, y por ello los transportes no pueden ser menos, se aprueban nuevos recorridos y se estudia prolongar líneas existentes (hasta la Universidad Menéndez Pelayo) y se suprimen casetas de cobro de billetes en Valdecilla, Perines y Puertochico
En 1966 se aprueba la adquisición de dos autobuses PEGASO 5022, se sustituyen los trolebuses por autobuses en la línea a Peñacastillo. Además se aprueba la elevación de la tarifa hasta dos pesetas, con entrada en vigor el uno de enero de 1967.
Las tarifas suben a 100 ptas. en junio de 1970, acordándose al tiempo la ampliación de la línea del Barrio Pesquero hasta San Martín. En 1971 se acuerda dar servicio a la Albericia y Complejo Deportivo, y comienza la implantación de la figura del conductor-cobrador, por lo que se aprueban se adquieran máquina expendedoras de billetes.
Al año siguiente se cree conveniente retirar paulatinamente las columnas del tendido de trolebuses. Los postes del antiguo tendido son 135, que serán quitados de la vía pública por Don Eleuterio López Alonso, a razón de 960 ptas. cada uno.
En 1973 se mejoran las líneas de transporte estableciendo un servicio con Mercasantander, y se solicita más crédito destinado a la adquisición de autobuses articulados.
Es en 1974 cuando se implantan nuevas tarifas, 5 ptas. para billetes ordinarios y 7 ptas. para microbús.
En 1975 se crea la línea de Cazoña, se cumplen 25 años de la creación de la Empresa Municipalizada de Transportes y se amplía el servicio nocturno durante los meses de julio y agosto. En 1979 se solicita que los billetes alcancen un precio de 15 ptas. como tarifa única y la puesta en circulación de tarjetas-abono de 22 viajes al precio de 200 ptas.

LLEGA EL BONO-BUS A SANTANDER

En el año 1981 como sucede en otras muchas empresas, los empleados de transportes realizan huelga intermitente.
Se acuerda asimismo solicitar la imposición de sanciones a las personas que suban al autobús sin billete, estableciéndose en 250 pesetas.
Ante la llegada de las canceladoras se interesa la implantación, del bono-bus. Tabacalera está dispuesta a la venta, previa comisión del 6% y con contrato por seis años.

En 1983, cuando la ciudad de Santander ya ha sufrido una notable transformación, se acuerda la creación de una línea de circunvalación que pase por la nueva Avenida de los Castros, se establece para tener derecho a pase de jubilados los ingresos anuales deben ser inferiores a 400.000 pesetas, aprobándose las nuevas tarifas, que quedan establecidas de la siguiente manera: billete único de 25 ptas.; bono-bus, 10 viajes, 200 ptas.; efectos (bultos) 15 ptas.
Se necesitan para el servicio nuevos conductores-cobradores y así, en 1984, para cubrir 25 plazas se presentan 159 solicitantes.

En septiembre el Consejo de Administración de Transportes Urbanos de Santander acuerda proponer la revisión de tarifas, debiendo quedar el billete en 30 ptas., el bono-bus en 240, y los efectos en 15. Al año siguiente, se acuerdan las nuevas tarifas, que empezarán a regir a partir del primero de enero de 1986 y que serán, 35 pesetas para el billete único y 280 para el bono-bus. Actualmente los precios del bono-bus son de 550 pesetas, y el billete único cuesta alrededor de 100 ptas.

ENTREVISTA A UN TRABAJADOR DEL S.M.T.U.

Pregunta.- -¿Qué nos puedes aportar sobre tu empresa?.
Respuesta.– Bueno yo no puedo decir muchas cosas pero te puedo contar algo sobre ella actualmente.
Está situada desde siempre en Cajo y posee aproximadamente 55 autobuses y 210 empleados (sin contar a los limpiadores/as, a los del mantenimiento de los autobuses, etc.) como conductores. Es una empresa que pertenece al Ayuntamiento de Santander. Cada año se va subiendo el precio del billete, hasta llegar a costar ahora mismo 100 ptas.
Todos tenemos nuestros propios compañeros para poder relevarnos, uno hace el turno de día y el otro el de noche, rotándonos todos por las diferentes líneas de autobuses. El horario de estos, varia según la época del año, si es verano o invierno. Hoy en día esta empresa posee unos autobuses muy modernos y comodísimos (que eso es lo que importa).

P.-¿ Puedes contarnos algo sobre el gamberrismo qué existe en los autobuses?
R.-Volvemos al tema de siempre. Los gamberros están en todos los sitios, pero en los autobuses hay bastantes. Los adolescentes se suben al autobús y empiezan a destruir y a quemar, pintar los asientos, etc. No saben respetar lo que no es suyo y fíjate si son ignorantes que destruyen lo nuevo y lo que no es de ellos.
Los autobuses cuestan mucho dinero y al Ayuntamiento no tiene porqué pagar los desperfectos.
Yo nunca les digo nada, porque no te hacen caso, así que qué voy a opinar sobre este tema (no hay solución).

Trabajo original