El X Congreso Regional de Educación, dedicado en esta edición a ‘Alternativas innovadoras, experiencias inspiradoras’, reunió a 360 docentes de Cantabria los días 14 y 15 de marzo en Santander. El objetivo de la Consejería de Educación era crear un foro donde abordar el uso de las estrategias metodológicas y contextos de enseñanza-aprendizaje que promuevan una escuela del siglo XXI. La red social Twitter tuvo un gran protagonismo en las jornadas con la etiqueta #XCongreso17, llegando a ser Trending Topic.

La vicepresidenta de Cantabria, Eva Díaz Tezanos, recordó durante la inauguración del congreso el compromiso del Ejecutivo regional con la innovación educativa y recordó que constituye uno de los principios que sustentan el modelo educativo que se pretende impulsar. En este sentido aseguró que la escuela «necesita renovar su alma» al objeto de «avanzar hacia una escuela más participativa e inclusiva para alcanzar una sociedad mejor». Por este motivo animó a los docentes a llevar a cabo «experimentaciones» y les alentó para perder el miedo a los cambios: «Es importante arriesgar, y es necesario implicar a las familias, y para ello contáis con una Administración que respalda estos cambios, os anima, y os va a ayudar».

Para la vicepresidenta, la escuela de la transmisión del conocimiento «no tiene sentido» en el siglo XXI y apostó por dar ese paso hacia una «escuela transformadora, viva, profundamente renovada, educativa y formativa». Por este motivo abogó por una educación dirigida a «ayudar a cada alumno y alumna a descubrirse a si mismo y sus potencialidades, la escuela debe de mirar a la sociedad y potenciar aquellos valores comunitarios que la hagan mejor».

A continuación, el catedrático de la Universidad de Málaga Ángel I. Pérez Gómez, impartió la conferencia ‘Nuevas pedagogías para afrontar la incertidumbre: principios, procesos Y aplicaciones’.

 

Presentación de experiencias

En las jornadas presentaron sus experiencias los centros que llevan a cabo proyectos integrados de innovación educativa (PIIE): Benedicto Ruiz, Ramón Pelayo, Flavio San Román, José Escandón, El Salvador y María Auxiliadora, además de los institutos Valle de Piélagos y Fuente Fresnedo.

También expusieron su trabajo dos colegios de fuera de Cantabria: el Ramón y Cajal de Alpartir, Zaragoza, y el Claver Raimat, de Lleida.

El congreso analizó las prácticas educativas cuya finalidad es construir una escuela inclusiva, que promuevan y respeten las diferencias, los valores y ofrezcan una respuesta educativa que permita a cada alumno y alumna desarrollar al máximo sus capacidades. Además, analizó el modo de promover un buen clima de centro y la participación activa de todos los miembros de la comunidad educativa. Otro de sus objetivos es el apoyo al liderazgo pedagógico de los equipos directivos reforzando la función de la jefatura de estudios en la coordinación de la formación de su centro.

Jornada de clausura

El pedagogo, periodista y sociólogo Jaume Carbonell impartió la conferencia de clausura, titulada ‘Pedagogías del siglo XXI: un recorrido por las innovaciones actuales’.

El consejero de Educación, Ramón Ruiz, puso el punto final al congreso animando a los docentes a “recuperar la ilusión por la tarea de educar, creer que es posible cambiar la escuela, sentirse protagonistas; creer que la educación sirve no solo para cambiar a las personas, también para mejorar la sociedad y hacerla más democrática”. Consideró el titular de Educación que “el cambio no viene de las Administraciones, aunque estas puedan ayudar más o menos, sino de los buenos centros, de los buenos docentes y de los municipios que se implican, porque es una tarea colectiva”.

Conclusiones

La Consejería de Educación ha reunido en un documento las conclusiones alcanzadas tras las dos jornadas del congreso educativo. Son estas:

Nos planteábamos con la celebración de este X Congreso de Educación objetivos como los siguientes:

  • Impulsar el uso de estrategias metodológicas y contextos de enseñanza- aprendizaje que promuevan una escuela del siglo XXI.
  • Apoyar y difundir las prácticas educativas cuya finalidad sea construir una escuela inclusiva.
  • Promover un buen clima de centro y la participación activa de todos los miembros de la Comunidad Educativa.
  • Apoyar el liderazgo pedagógico de los equipos directivos reforzando la función de la Jefatura de Estudios en la coordinación de la formación de su centro.

Tras la escucha activa de las distintas ponencias y de las presentaciones de las experiencias por parte de los centros, podríamos recoger a modo de conclusiones algunas ideas en las líneas planteadas sin ánimo de ser estructuradas.

  • Cuando miramos a nuestro alrededor, incluso aquellos países que son referente por su éxito educativo se están replanteando sus formas de hacer y enseñar, interviniendo en los métodos, reorganizando el currículo, prescindiendo de la división disciplinar, abordando los aprendizajes por medio de proyectos, estudio de casos, planteamientos de problemas… Los contenidos, tal como los ofrecemos, están diseccionados y muertos, alejados del tiempo del alumnado y es imposible disfrutar de ellos.
  • Cada vez han de tener más relevancia las habilidades y valores sociales, y las actitudes personales responsabilidad y resiliencia.
  • Somos tutores de personas no tutores de disciplinas. Hemos de preparar a nuestros alumnos para un proyecto de vida.
  • En esta nueva sociedad tenemos que hacer-pensar-hacer-pensar a nuestro alumnado. No podemos seguir enseñando de la misma manera en una sociedad digital. Se aprende lo que emociona, se aprende de la realidad y lo que aprendemos debe tener consecuencias en esa realidad. La esencia y el alma de la escuela deben cambiar.
  • Nuestro ámbito de intervención como docentes es el de las capacidades cognitivas superiores (analizar, evaluar, crear).
  • Hay que sustituir la pedagogía de la repetición, de la transmisión memorística, de la fragmentación disciplinar, de los estándares comunes… Una escuela que seguramente ha servido para la distracción, plena de contenidos irrelevantes, por otra de pensamiento práctico, basada en competencias, plena de aprendizajes relevantes, de emociones…
  • Las competencias del siglo XXI podríamos resumirlas en tres grandes áreas: la científica y artística, la ética y social y la autonomía. La educación debe ayudar al alumnado a descubrirse.
  • Hemos de replantearnos los modelos de evaluación, plantearnos nuevos escenarios de aprendizaje, repensar la función docente. HEMOS DE REINVENTAR LA ESCUELA.
  • Necesitamos formación. La formación aporta rigor y da más sentido a lo que hacemos. Cuando encontramos asesores que nos ayudan y seleccionan materiales, cuando dan sentido a nuestras pretensiones y deseos, nos encontramos.
  • Tenemos que recuperar la función intelectual de nuestro trabajo pero no en un sentido individual del término, es un trabajo colaborativo, necesitamos de las redes de centros. La innovación es una actitud colectiva y comunitaria y los cambios han de proponerse desde dentro de la escuela. Tenemos que partir de la experiencia y de los proyectos realizados en los centros para poder integrar las actuaciones e implicar a todo el profesorado. Necesitamos conocer todo lo que hacemos en los centros para trabajar coordinadamente con el alumnado.
  • El camino emprendido nos ilusiona, encontramos tiempo para coordinarnos (muchas veces fuera de nuestro horario). Nos recompensa y reconforta ver a nuestro alumnado que se siente más feliz, que acude al centro con más ilusión, que aprende y aplica su conocimiento, que mejoran sus relaciones personales y la convivencia, que vemos una implicación mayor y más apoyo de las familias.
  • Los proyectos integrados nos han dado la oportunidad de que todo el profesorado participe y se implique en los planes del centro, hemos dado sentido a acciones que antes estaban aisladas.
  • Los equipos directivos tienen que liderar y apoyar las iniciativas innovadoras que surjan y las administraciones educativas apoyarlas. No pueden ser en ningún caso un freno.
  • No caigamos en una innovación vacía, en un mero activismo, en la aplicación de metodologías sin método. INNOVAR ES LLEVAR HASTA EL LÍMITE TUS SUEÑOS.
  • Necesitamos una escuela inclusiva, transversal en cuanto a edades, con la intervención de otros agentes educativos. No podemos prescindir de los padres y de las madres, les abrimos los espacios y necesitamos que intervengan, sus aportaciones dan frescura a lo que hacemos y motiva a los alumnos.
  • Hemos de revolucionar los espacios y los tiempos escolares. “El hall de nuestro centro era un espacio sin definir, ahora ha cobrado pleno sentido para comunicarnos con nuestro alumnado”. “Todos los espacios y todos los tiempos educan”.
  • El cambio educativo no tiene marcha atrás porque los cambios ya están produciendo beneficios.